Camil recibe la llamada que cualquier mujer casada y que ama a su esposo nunca desearía recibir, su marido, ha muerto en el cumplimiento de su deber en un accidente de auto lo que la deja devastada. Mientras examina sus restos, se da cuenta de que a...
-Regresa –dijo Chris –hay una tienda donde venden artículos de fiesta a unas cuadras de aquí, si corremos, alcanzamos a encontrarla abierta
-No –dije –ahora mismo lo resuelvo
-¿Cómo?
-Confíen en mi
Miré por todos lados un antifaz que combinara con mi atuendo y lo encontré en una mujer anciana que llevaba un abrigo de color negro demasiado grande, sería fácil quitárselo porque su cabello esponjado y corto no la dejaría sentir cuando deslizara el antifaz que llevaba en la cabeza como si fueran gafas.
Acelere mis pasos para quedar cerca de ella y miré por todos lados para que nadie estuviera poniéndome atención, la mujer iba hablando con otra mujer supongo que de una edad parecida a la de ella, las dos iban muy entradas en su conversación, por lo que sería fácil quitar el antifaz.
-¿Qué haces? –preguntó Jungkook
-Consiguiendo un antifaz
-¿Cómo?
-Ten paciencia
Me acerqué lo suficiente a ellas como para poder estirar mi brazo y tomar el antifaz, así como para no entrar en su área de visión.
Tomé mi bolso y saqué una moneda, había traído un poco de efectivo por si llegaba a necesitarlo. Lance la moneda, la hice pasar por en medio de ellas para que cayera enfrente y con suerte, ellas escucharon el sonido de la moneda cayendo contra el pavimento haciendo que las dos se detuvieran un momento y agacharan la mirada, en ese momento como si mis dedos fueran pinzas, atrape el antifaz para que en el momento en que la mujer se agachó, lo pude deslizar con delicadeza por su esponjoso cabello.
Con el antifaz en mis manos, me di la vuelta rápidamente y me alejé de ellas quedándome atrás.
-Listo –dije
-Excelente –dijo Chris –serías una buena carterista si practicaras un poco
-Puede que tengas razón
De todos modos, esperé un poco a que las mujeres llegaran a la puerta y las corrieran.
Después de un tiempo, caminé a la puerta y me encontré con esas dos mujeres afuera, la que no tenía el antifaz estaba llamando por teléfono siendo acompañada por su amiga, por eso, cuando pasé delante de ellas escondí el antifaz a mis espaldas, lejos de sus miradas y solo me lo puse dentro cuando estuve cerca de los guardias de seguridad.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
No veía a Seonjoon por ningún lado y espero que sea así por toda la noche, no quiero que arruine esto.
-Buenas noches, señorita ¿Podría darme su nombre?
Un policía con traje estaba en la entrada con una tableta en las manos.
-Abigail Green
El hombre miró la lista y sonrió cuando me encontró.
-¿Nos permite revisar su bolso? Por favor –señalo con la mano a su compañero que estaba del otro lado
-Nos vemos en un segundo –dijo Chris y supongo que apago todo o puso ese campo para que no lo detectaran
Al hombre le entregué mi bolso y después de revisarlo un poco me lo entrego para continuar con un rápido y avergonzado chequeo con el detector de metales que no sonó para nada porque no lo pasó por mi cabeza o por mi pecho, simplemente por la falda del vestido.
-Todo en orden –me entregó la bolsa –puede pasar, que disfrute la noche
-Gracias
Una vez dentro, lo único que tenía que hacer era buscar a Didier, poner el localizador, evitar a Seonjoon y a la mujer a la que le quite el antifaz.
-Estamos de vuelta, preciosa
-Si pueden ver a Didier, avísenme, sería bueno que todos ustedes se enfocaran en una persona
-¿Una persona? –preguntó Jungkook
-Necesito evitar a la mujer a la que le robe el antifaz, evitar a Seonjoon y encontrar a Didier
-Yo te avisaré si veo a la mujer –dijo Hanako
-Yo buscare a Didier -dijo Chris
-Creo que yo me enfocare en Seonjoon -Jungkook no parecía estar muy emocionado por su trabajo
-Bien
Y así comencé a mezclarme entre las personas. Había mucha comida, bebidas y risas, así que yo aproveché y tomé bocadillos de los meseros que pasaban con las charolas, tomé una copa y simplemente caminé por el lugar como una simple invitada al mismo tiempo que buscaba al señor Michael.
-¿En serio? –escuche a Chris por el micrófono
-¿Qué pasa? –pregunté
-Acaban de mandarme un mensaje
-¿Y?
-Didier está siendo vigilado a lo lejos por el detective
-¿Cómo lo sabes?
-Mi hermano lo sabe todo, él es el que me informa
-¿Cómo es él?
-No lo sabe, solo dice que es el que nos persigue
-¿No saben cómo es?
-No –dijo Hanako –todo el tiempo los cambian para eso mismo, para que no lo conozcamos
-Genial –dije –ahora el enemigo me estará viendo sin yo saber quién es
-No lo hagas –dijo Jungkook –no te arriesgues, ya encontraremos otro modo de dar con él
-Está bien –le di un trago a mi copa mientras sacaba mi teléfono y fingía tomarme una foto –encontraré un modo de hacerlo
-Camil, prometiste protegerte y no hacer nada peligroso
-Solo prometí correr sin mirar atrás en caso de necesitarlo
-Camil
-Jungkook, pareces mi madre
-Pues deja de hacer lo contrario a lo que te dicen
-¡Chicos! –gritó Hanako –se pelean en casa, ahora no
Los dos nos quedamos en silencio.
-Camil ¿Cuál es el plan?
-Hanako
-Jungkook, solo estoy preguntando la idea que tenga
-Primero tengo que encontrarlo y mirar su alrededor, algo se me ocurrirá después
-Pues es momento de pensar en algo –dijo Chris –a las 3 en punto
Llevé mis ojos hacia donde Chris me lo había indicado y lo encontré. El Didier que me habían mostrado en una foto ahora lo tenía frente a mí en vivo y en directo. Estaba con más personas, hombres y mujeres, hablando alrededor de una mesa negra de esas pequeñas y altas que solo sirven para poner bebidas y nada de comida.
-¿Qué se te ocurre? –preguntó Hanako
-Lo más clásico y típico de la vida
-¿Qué es? –preguntó Jungkook nervioso
-El clásico acto de chocar con el objetivo, nunca falla
-¿Nunca falla? ¿Cuántas veces lo has usado? –parecía asustado
