Capítulo 9 🎬

1K 290 87
                                    

Han pasado dos semanas y pronto nos tocará grabar la primera escena íntima entre los personajes

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Han pasado dos semanas y pronto nos tocará grabar la primera escena íntima entre los personajes. No sé por qué eso me genera cosquillas nerviosas, probablemente porque me incomoda grabar una escena así con alguien que sé que me admira. Debería ser más sencillo, pero por algún motivo, no lo es.

Estoy en un espacio abierto, en una cafetería que hay en los estudios de grabación, miro mi guion y repaso las líneas que debo grabar en un rato, pero pronto me pierdo en la escena en la que Ivanna y Luca tendrán su primer acercamiento real. Es una escena que carga diversión y melancolía en iguales proporciones. El chico está borracho y piensa que está en un sueño, aprovechando aquella situación, ella se deja ir en la parte de atrás de un vehículo.

—¿Por qué me has ignorado todas estas semanas? —No me he dado cuenta cuando se ha acercado, creía que él estaba en otra locación, pero por lo visto ha llegado. Su voz no suena a reproche, sino más bien a curiosidad. Me pregunto qué le importa, por qué quiere acercarse a mí, por qué insiste tanto.

—Deberías saber que cuando alguien te ignora es que no quiere ahondar en nada contigo —respondo sin mirarlo—. Es una señal... y si algo he aprendido en esta vida es que hay que hacerles caso a las primeras señales.

Él no responde, se sienta a mi lado sin permiso y ordena un cappuccino. Yo levanto la vista y lo observo con descaro. ¿Qué se cree?

—¿Perdón? ¿Quién te ha invitado a sentarte? —inquiero mirándolo.

Él sonríe, su sonrisa es algo juguetona y siento que derrite algo en mi interior. Bajo la vista y finjo revisar mi teléfono celular.

—¿Irás a la fiesta? —pregunta.

—No lo sé, no lo creo —respondo sin más. Hace dos días todos recibimos la invitación para una fiesta de inicio de rodaje. Llevamos varias semanas grabando, pero por uno u otro motivo no es hasta ahora que podrá realizarse. Siempre hacemos dos fiestas, una al inicio y otra al final.

—No puedes faltar —insiste y siento su mirada sobre mí, yo sigo sin levantar la vista de mi celular.

—Puedo hacer lo que se me antoje —respondo con frialdad.

—Sí, como ignorarme toda la semana —dice él y se encoge de hombros—. ¿Cómo estás? ¿Ya te sientes mejor con respecto a...

No continúa, yo sé a qué se refiere y me molesta, me molesta que él me pregunte cómo estoy y me molesta que se preocupe por mí, me molesta que sepa algo de mí y que me haya visto tan vulnerable. Eso le da poder, eso le da una ventaja y yo odio que la gente tenga poder sobre mí.

—¿A qué te refieres? —inquiero fingiendo desconocer de lo que habla—. ¡Ah! La verdad es que ni lo he pensado.

Lo miro con frialdad para darle fuerzas a mis palabras, él me observa, se mete en mi mirada como si buscara en ella algún atisbo de debilidad de la cual pudiera aferrarse.

La vida NO es una película 🎬Where stories live. Discover now