el marginal (cesar)

03. una oportunidad

ariana espera impaciente sentada en la cama a que cesar ingrese al cuarto de visitas. escucha las rejas abrirse y sabe que se trata de él. se aclara la garganta nerviosa y cuando lo ve ingresar por la puerta, se levanta de inmediato. siente la misma emocion de siempre al verlo, aunque a él se lo note aún enojado por lo de ayer. se apresura a abrazarlo por los hombros. él le corresponde por la espalda, y apoya sus labios en el hombro de ella, cerrando los ojos. ari le da un beso en la mejilla y otro en la boca, que cesar corresponde, pero sigue igual de serio desde que entró. se separan y ari pregunta. "¿cómo estás?" cesar no le responde y se sienta él sólo en la cama. ariana se pone seria de golpe ante su indiferencia. "¿seguis enojado por lo de ayer?" él no le contesta y mantiene su mirada fija en cualquier lado del cuarto menos en ella. ariana se muerde el labio con frustracion y se sienta junto a él. "bueno. voy a aprovechar que estás en bendi caprichosa y te voy a explicar lo de pastor" le dice sentandose junto a él.

"no lo nombres a ese gil" dice de inmediato.

"¡ah! ¡mirá! ¡podes hablar!" eleva su voz haciendo gestos exagerados con las manos. cesar la ignora otra vez. "¿te acordás cuando los borges me ataron a la mesa y me entregaron?" cesar no responde, mantiene su seria mirada al frente. "ese dia entre los policias que me vinieron a buscar, estaba pastor. en ese momento me enteré. en el camino, me soltó"

"¿y porqué te soltó?" pregunta acusandola.

"que se yo, le pintó. nunca me dijo el verdadero motivo, pero me pidió que no dijera nada" cesar se muerde el labio y niega con la cabeza. "si no fuera por eso, hoy estaria presa, y ahí si que no nos ibamos a ver nunca más" le recuerda para que reaccione. nota que algo por dentro se le mueve a cesar al oir lo último. entonces ari se da cuenta de un detalle. "¿vos no sabes como fui a caer yo al hospital, no?" cesar la mira a la cara por primera vez.

"te encontraron ahí al lado del nico" ella niega con la cabeza, sonriendo amargamente.

"pastor, me salvó" le cuenta. él la observa algo confundido esperando explicaciones. "borges me estaba por rematar. los cagó a tiros y se tuvieron que ir a la mierda. vino, me levantó, me llevó hasta la esquina y llamó a la ambulancia" cesar parece cambiar las expresiones de su cara a medida que va oyendo la historia. "si no fuera por él, hoy cumpliria casi dos años de muerta. te guste o no, lo quiero. lo aprecio. estoy muy agradecida con él. y si vos me queres aunque sea un poco, tambien tendrias que estar agradecido" dice ahora angustiandose. "estoy haciendo un monton para poder venir a verte todos los días acá. no me merezco que me trates así y que no me hables" es lo ultimo que dice y se levanta, camina hasta la puerta de cortina y se detiene ahí, colocando una mano en su cintura y limpiando sus lagrimas que se derraman, dandole la espalda. cesar analiza todo lo que acaba de oir y se pasa las manos por el pelo. larga un suspiro ruidoso y se levanta de la cama. camina hasta ari y se detiene detras de ella, escuchandola llorar. le rompe el corazon pero a la vez le da cierta ternura. la abraza desde atras por los hombros y apoya el menton en el hombro femenino.

"mi reina" murmura en su oido. ariana voltea y él atrapa su boca de una manera tan delicada y amorosa, acariciandole las mejillas. ella coloca las manos en su cintura, cerrando los ojos y dejandose volar alto por la adiccion de sus besos. "¿me perdonas?" pregunta cesar contra su boca, sin interrumpir el beso. ariana asiente con la cabeza y aprieta la cintura de él. "¿sí?" vuelve a preguntar casi inaudible, para soltarle la cara y levantarla por las piernas. ella lo abraza mientras lo besa con tanto amor y a su vez con tanto deseo. la acuesta en la cama y se coloca entre sus piernas. de inmediato entra en ella y se dedica exclusivamente a besarle el cuello, morderlo, haciendole chupones y dejando muchas marcas, haciendola delirar de placer y de amor por él.
                       cesar vuelve al patio y es recibido por la sub21 a los golpes juguetones. "hasta que apareces pedazo de gato" le dice arnold. "te fuiste como seis horas amigo" cesar devuelve todos los golpes que está recibiendo.

"garchaste de lo lindo seguro" dice pedrito en su bicicleta. "espero que no hayas acabado muy rapido"

"¿querés ver, puto?" le dice cesar y golpea su visera. todos estallan en carcajadas.

"¿qué dice la ari?" pregunta arnold.

"te trajo esto" le revolea un paquete de facturas. "son medialunas, pero los ratis las rompieron todas por si habia algo adentro viste"

"cheta la cabida" responde contento. cesar divisa a pastor sentado bajo un techito, observando la escena con una sonrisa apagada. en cuanto hacen contacto visual, pastor se pone serio de a poco. cesar tambien lo hace, y camina hasta él. se sienta a su lado prendiendo un cigarrillo.

"si venis a boquearla, la verdad que no tengo ganas de escucharte. hoy no tengo ganas de que me rompa las pelotas nadie" le pide pastor con sinceridad, notandose su mal humor y quizas una tristeza oculta.

"no te vine a bardear" aclara cesar mientras ambos miran a los presos hacer sus respectivas actividades. "recién hablé con la ariana"

"si, ya veo" responde haciendo alución a los chupones de su cuello. cesar ignora ese comentario.

"vos le salvaste la vida" le dice y lo mira. pastor poco a poco le devuelve la mirada. "y ella es mi vida. asi que te agradezco, de corazón te digo" pastor se sorprende. pero asiente con la cabeza. "está todo bien entre nosotros, tenes mi respeto, y cuando necesites algo, yo te voy a ayudar, así como la ayudaste a ella" le extiende la mano. pastor tarda, pero finalmente toma la mano de cesar y se dan un apretón, dejando atras todos los conflictos del pasado y sellando una nueva amistad.

"gracias papá" le agradece pastor de corazon. cesar le da una palmada en el hombro y se levanta, yendose a jugar a la pelota. pastor lo observa irse, pensando en que hace mucho necesitaba un verdadero amigo adentro de esa pesadilla de san onofre.