06. triste cancion de amor (último)

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2 meses después...

en su celda, cesar permanece de pie mirando su gigantesco santuario al gauchito gil. prende más velas junto a las fotos de arnold, a quien han asesinado los capos del nuevo penal hace apenas unos días y a quien se lo han arrancado de sus manos. su nudo en la garganta le duele, e ignora a la sub21 detras de él charlando animadamente sobre cosas sin sentido. se traga su dolor cuando mira las otras fotos que tiene junto a las velas. la foto que está con ella, en una de las noches del carnaval, sigue allí. pero eso, y ella, son solo un recuerdo. cesar había reflexionado toda la noche en su primer día en puente viejo. en dos meses se había convertido en otra persona. maduró de golpe. sus unicos objetivos son estudiar, tratar de no meterse en líos, sólo saltar por los suyos y principalmente, no aferrarse emocionalmente a nadie. a pesar de eso, no puede ignorar las brutalidades que se viven día a día en puente viejo. torturas, asesinatos brutales y mas que nada, los ultimos acontecimietos que le ha tocado sufrir y ver. el brutal asesinato de su amigo, crucificaciones a guardias, masacres entre internos. san onofre era un lugar agradable a comparacion de esto que jamas creyó ver o experimentar. sus pensamientos y su ritual es interrumpido por uno de los guardias que ingresa a su celda. "cesar, tenes visita" le avisa. él no responde. mira su foto con ella, y sabe a la perfección lo que ocurrirá. sin decir nada, sale de su celda y escoltado camina por los pasillos de puente viejo. cesar siempre supo que este momento llegaría. deseaba que no, pero así lo quiere el destino. y debe mostrarse lo más fuerte que puede, tragarse todo su dolor y su vulnerabilidad. al terminar el extenso tramo, llegan a la sala de visitas y efectivamente, ariana está esperandolo en una de las mesas. el guardia lo abandona. no puede disimularlo, su corazon salta al verla otra vez. desde que se separaron en la ruta no la habia vuelto a ver, pero él sabia que ella volvería algun día. se emociona y sus latidos se aceleran. todo eso se multiplica cuando ella lo ve y hacen contacto visual. él le sonrie un poco cuando la ve emocionarse a traves de las lagrimas de ella. cesar camina hasta la mesa y ari lo abraza. él le corresponde, suavemente. sentir el calor del cuerpo femenino otra vez lo hacen temblar. esto no durará mucho, pero no quiere estropear el momento aún. cuando se separan, ari le da un beso en la comisura de los labios que él acepta. ambos se sientan enfrentados.

"¿cómo estás?" le sonrie ella, agarrando sus manos. cesar le acaricia los dedos.

"bien" responde en el mejor tono que le sale. "¿vos?"

"bien" le responde asintiendo con la cabeza y sonriendole. "¿cómo está arnold?" esta pregunta rompe a cesar por dentro, pero no muestra indicio alguno.

"está bien" miente. la decision de ocultarle la muerte de su amigo era la mas acertada, para no terminar de destruirla con lo que vendrá a continuación. ella asiente con la cabeza, feliz. "¿cómo volviste?" le pregunta refiriendose a su separamiento en la ruta hace dos meses, aun acariciando sus dedos.

"a dedo" le cuenta como si no fuera eso lo importante. "yo sabía que me echaste porque no querias que caiga en cana. tenias razon, aca estoy y nos podemos seguir viendo" cesar sonrie. "yo sabia que no me ibas a disparar"

"jamás seria capaz de hacerte una cosa así" le dice y besa su mano con mucho amor. ella sonrie con sonrojo. "pero... tengo que decirte algo, ari. y espero que me puedas entender, algun día. porque se que en este momento no lo vas a hacer" ella poco a poco se pone seria porque se asusta.

"¿qué?"

"no quiero que vengas más, ari" ella frunce el ceño, desesperandose a niveles impresionantes.

"¿de qué hablas?" cuestiona riendo de los nervios.

"no te quiero ver más" estas palabras destruyen a ari por dentro, y poco a poco se le van cayendo las lagrimas.

"¿porqué? no entiendo" responde calmada, sorpresivamente para cesar. ari le suelta las manos y esta accion lo mata por dentro.

"este lugar no es san onofre. no tenes ni idea de las cosas que pasan acá. yo no me voy a escapar, ni lo tengo pensado. tengo muchisimos años aca adentro. cuando salga, si es que lo hago, voy a tener cuarenta años, ariana. y vos tambien. no te quiero anclar a mí" todo eso era cierto. pero por mas que lo fuera, tambien era una pantalla para ocultar su verdadero motivo; evitar aferrarse otra vez a ella para ahorrarse otro sufrimiento de alguna posible perdida. la muerte de su amigo, lo traumó.

"y dale con eso" dice ariana harta, frotandose la frente. "no me estás anclando a nada, yo estoy aca porque es lo que quiero. quiero estar con vos" cesar sabía que ella respondería algo como eso. la conoce muy bien, y ariana a él tambien. por lo que, ella sabe a la perfeccion que él le miente y le oculta los verdaderos motivos. y él presiente esto. entonces, decide ir a la opcion segura. a su punto debil, a lo que sabe que ella jamas le perdonaría.

"ariana, yo cambie muchisimo en estos dos meses. mientras vos no estabas, estuve con otra" miente. le destruye por dentro ver como acaba de matarla. la deja hablar, pero ella no lo hace por unos segundos porque no sabe como.

"¿quién?" es lo unico que pregunta ahogada.

"la enfermera de acá" responde y baja la mirada, porque si la sigue viendo destruyendose por su culpa, se largará a llorar como un niño. "yo cambié, ariana. esta piba estudia, trabaja de lo que estudia. es una buena mina. vos deberias hacer lo mismo que ella" la enfermera si existia, y su buena relacion con ella tambien. pero solo era eso, una buena relacion. jamas se dió a entender otra cosa entre los dos. y si así fuera, por más que sea mutuo, ella nunca ocuparia el lugar de ariana. ni ninguna otra mujer que cesar conozca en el futuro a lo largo de su vida.

"¿qué?" pregunta ari en un hilo de voz. de golpe, se levanta echa una furia y tira todas las cosas que le trajo a cesar de un manotazo, provocando que todos a su alrededor miren la escena. cesar se levanta de inmediato. "¡sos un hijo de puta!" le grita ariana y se apresura hasta él para empujarlo y pegarle piñas. él intenta detenerla sin hacerle daño. "¡sos un hijo de puta cesar!" le grita desgarradoramente y llena de dolor, sin dejar de pegarle. los guardias llegan de inmediato y los separan, arrastrando a ariana por un lado y llevandose a cesar violentamente por el otro. "¡puto de mierda! ¡no se hace eso! ¡traidor!" grita removiendose entre los brazos del guardia. "¡cualquiera te mandaste, te voy a matar!" cesar escucha sus gritos y ahora si, se pone a llorar desconsoladamente. el guardia lo suelta y lo revuelca por el piso.

"no puedo entender como negros villeros como ustedes pueden hacer sufrir a tremendas mujeres" le dice el guardia cerrando la reja delante de él. cesar se sienta en el piso y seca sus ultimas lagrimas. por su parte, ariana corre a plena luz del día por las solitarias, muy pocas transitadas y peligrosas veredas a toda velocidad mientras llora. siente uno de los dolores y traiciones más grandes que ha vivido jamas. se cansa y se queda sin aire, por lo que se ve obligada a detenerse de golpe para recuperarse. se agacha colocando sus manos en sus rodillas y rompe en llanto otra vez. no sabe que hacer. no sabe como procesar lo que acaba de pasar, y lo peor de todo, no sabe como empezar de cero sin él. se reincorpora para seguir huyendo a su casa, pero debe tomarse unos segundos mas para recobrar más aire mientras llora. entonces, una persona que pasa corriendo por la cuadra de enfrente se lleva toda su atencion. se olvida de llorar por un momento cuando cree reconocer ese color platinado de cabello. su expresion cambia en su totalidad cuando lo reconoce a medida que se aleja. es diosito.

el marginal (cesar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora