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Una de las enfermeras le dijo a Jin que Jimin no despertaría hasta al anochecer pues estaba recuperando las horas de sueño que le faltaban, para lo cual Jin aprovechó ir nuevamente al apartamento y llevar sus cosas y las de Jimin al hotel, pues quedaba más cerca que el apartamento que él hacía alquilado. Con el ajetreo Seokjin se olvidó de comer pero eso no le importó, se sentó en el mueble que estaba en la habitación de Jimin, en espera a que el mencionado despertara.

Una llamada interrumpió sus pensamientos vacíos, era un número desconocido, salió de la habitación con las manos temblando, ¿por qué le tenía tanto miedo a una llamada desconocida?

-¿H~hola?

-Seokjin ¿estas bien?- era Namjoon.

-Si- reviso la hora en su teléfono, aún no se acostumbraba a los horarios de París y sin darse cuenta su horario de merienda se había ido junto con el de almuerzo pero poco le importo. 

-Ya llegue, ¿en donde estas?- Seokjin no respondió -aún no cae el sol- dijo con una voz suave.

-Estoy en el tercer piso, te esperaré en la cafetería.

-Bien.


Esta vez el primero en cortar fue Namjoon, Seokjin caminó hasta la cafetería, en su camino otra llamada entró, otro número desconocido marcándole, algo en él le decía que no era ninguna llamada que esperaba, sus manos empezaron a temblar nuevamente, el teléfono seguía sonando haciendo que los temblores de sus manos se expandieran por su cuerpo. De pronto unos brazos lo rodearon por detrás asustándolo aún más hasta que...


-Estoy aquí- para Seokjin fue inevitable no sentir paz, incluso sus piernas se rindieron y Namjoon logró sostenerlo -está bien, tranquilo.

Namjoon ayudó a Jin hasta llegar a una de las mesas, su teléfono había dejado de sonar.

-¿Jin? mírame- desorientado levantó su vista mirando por fin a Namjoon acuclillado frente a él -¿estás bien? 

Seokjin estaba tan cansado de mentir cuando le hacía esa preguntaba, estaba tan cansado de que aquellas mentiras le salieran tan normales, estaba cansado de fingir pero no quería que otros se preocuparon por él, por lo menos no ahora.

-Si, yo...- el ruido de su celular hizo que su respiración se cortara, Namjoon lo notó. 

-Seokjin ¿quieres que conteste por ti?

-Yo...

-Está bien, puedo hacerlo- y sin esperar respuesta le quito el celular, y lo llevó a su oído -Hola- la voz de Namjoon se había vuelto más ronca, seria y monótona.- Los ojos de Jin miraron atentamente a Namjoon rogando a aquello que existiera que por favor no sea la llamada que estaba pensando -Es Jungkook- le dice, logrando que sus pulmones soltaran el aire que estuvo reteniendo -si, te explico después, estamos en el piso tres en la cafetería.


Un rato después Jungkook y Taehyung aparecieron en la cafetería con sus maletas, Seokjin los vio a lo lejos y se levantó, logrando que Namjoon imitara su acto, Jin estaba consciente de que el momento de ser más fuerte había llegado, pues a quien más le iba a doler era a Taehyung, lo sabía y le dolía ser él el que tenga que dar la noticia. 


-Jin- fue lo primero que dijo Taehyung para luego abrazarlo con tanta fuerza, logrando que su corazón se llenara de dicha y a la vez de un vacío. 

-Vamos a sentarnos- dijo después de que intercambiaron saludos. 


Jungkook miro a Namjoon pero decidió que no era el momento para preguntar, así que sin mucho que decir se sentó junto a Taehyung, uniendo un poco más sus sillas pensando que tal vez las noticias no serían nada bueno y su novio lo necesitaría. 

La noche del inicio  (Yoonmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora