Capítulo Uno.

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Disclaimer: Los Vengadores son de Disney y de Marvel. Solo la historia nos pertenece.

Se recomienda discreción.

Lasciate ogni speranza, voi ch'entrate.

1992

El espacio era sombrío, la luz demasiado tenue y el frío lograba colarse hasta los huesos. El general fumaba un puro, mientras la directora supervisaba que todas las niñas obedecieran las reglas.

—¿Cómo se formarán las parejas, Mi señor?— No estaba de acuerdo con aquel proyecto, pero tampoco lo expresaría.

—La mayoría de ellos no llegarán a los quince años.—Se encogió de hombros soltando el humo del puro— Los más fuertes sobrevivirán, así que deben permanecer juntos.

—Entonces vamos a basarnos en el índice de supervivencia, y el momento de su toma.

—Esos niños no fueron tomados para ser Viudas Negras, Madame—Chasqueó la lengua molestó. Nadie entendía su idea— A diferencia de las Viudas, no me interesa que piensen. Esto es un acto de sumisión.  Simples armas de guerra.

La mujer lo veía molesta, incapaz de entender aquello. ¿Cómo era posible? La Madre Rusia debía someter, ¿para qué servirán aquellos soldados que hacían lo contrario?

— No lo entiendo, general.

—Son el complemento de las Viudas. No necesitan tener un pensamiento propio— Observó a las niñas, deteniéndose en la pelirroja de labios apretados—Necesito que obedezcan la voluntad de quienes se forman para tener lealtad; pero que también tengan la paciencia para actuar cuando es prudente. Que complementen los fallos del proyecto Viuda Negra.

—Parece que ha tenido tiempo para pensarlo, General. - Observo a la misma niña pelirroja, era la clave para la supervivencia de la organización. le molestaba que el general no lo notase.

Las Viudas eran letales y rápidas, demasiado inteligentes, pero a menudo actuaban con demasiada confianza, y olvidaban la prudencia, nunca fallaban. Pero estaba cansado de los escapes improvisados, y la debilidad propia del genero. El general sabía que debía equilibrar la balanza, crear al equipo perfecto.

—¿Cuál es el fin de este proyecto, General Dreykov?—Se atrevió a preguntar por fin.

—Ser más fuertes.

La respuesta contundente dejó en claro que no compartiría sus verdaderas intenciones.

—General, la primera generación de soldados rojos ha llegado.

Alexei Shokastov entró entonces, con los niños siguiéndolo, todos con la mirada perdida. Los formó al lado de las niñas de postura pulcra y semblante asustado.

—En fila— Ordenó el general—Uno al lado de cada niña, Capitán.

Los niños obedecieron sin problema, el capitán trago grueso al ver la macabra escena que se desarrollaba. Sabía que era por el bien de la organización, pero eso no quería decir que su conciencia se mantuviera tranquila. Eran niños después de todo. infantes cuya inocencia sería arrebatada en cuestión de segundos.

—¿Qué planea hacer, General?—Preguntó Madame B.

—Selección natural—La mujer no lo entendió—Desactive el control mental, Vostakoff.

Melina Vostakoff obedeció la orden, apagando los dispositivos de control químico que les instalaron al entrar en la sala roja. Los niños parecían volver en sí, con las miradas desorientadas y asustadas. Podían recordar cómo los habían tomado, pero no porque estaban allí.

RENEGADES (ASTERIXBADBITCH)Where stories live. Discover now