Capitulo diecinueve.

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"Quien a ser traidor se inclina, tarde volverá en su acuerdo."

Habían pasado aproximadamente seis meses desde la entrada de Barton y Morse a la Sala Roja. Para aumentar la frustración de Natalia, ellos dos se posicionaron como los favoritos de Dreykov, dejándola un poco de lado. Trabajaba arduamente, cumpliendo las misiones que le pedían, pero sentía que no era suficiente.

—¿Van a activar de nuevo el proyecto Rebirth?—le preguntó casualmente a Melina.

La morena observó a la chica con una ceja alzada, cada vez era más independiente, pero iba a verla al terminar las sesiones con las niñas de la nueva generación de Viudas. Aquel trabajo la desgastaba moralmente.

—¿Estás interesada en él?—preguntó Melina.

—Solo era...curiosidad.

—Aún no sabemos._ se encogio despreocupadamente- siguen trabajando en una forma para garantizar que el suero funcione, probablemente la siguiente vez intenten con Barnes y Wanda.

—Pensé que Barnes se había ido.

—Volverá, siempre lo hace. Solamente ha sido un préstamo a H.Y.D.R.A.

Cuando se enteraron de la participación de esa organización como compañeros de ellos, los Renegados habían tenido reacciones diferentes. Steve había sido quien peor se lo había tomado; recordaba las historias contadas por su abuelo acerca de ellos en la segunda guerra mundial. Había terminado siendo brutalmente torturado, al punto de quedarse en el hielo por varios días; ese había sido otro punto de quiebre entre la pareja, pues Steve se había rehusado a ser curado por la espía.

—Tengo que advertirles.

—¿Vas a hacerlo?—dijo Melina, retadora—Vas a delatar a la organización, ¿cómo saldremos de aquí si lo haces? Te cuento todo esto para que estés preparada, pero no te he enseñado a ser una bocona.

—¡Nunca me has enseñado nada!—espetó Natalia—¡Estoy cansada de fingir que somos madre e hija reales! ¡Esto es más que una mentira!

—Natalia, espera...

La renegada no esperó a que la mujer le dijera nada más, caminaba con determinación por la sala para encerrarse en su habitación, aprovechando que Steve no estaba porque tenía una misión con Morse, Barton y Maximoff.

—¿De verdad es el lugar correcto?—preguntaba Bobbi—¿Para conseguir los insumos?

Mientras tanto, los agentes encubiertos observaban con preocupación a los dos renegados. Si bien Wanda y Steve habían trabajado juntos toda su vida, no eran tan efectivos como con sus respectivas parejas. Llevaban horas intentando penetrar a la base de datos pero estaban preparados para eso, con protecciones especiales que incluso burlaban a la KGB.

—¿Y si usamos tus poderes, Wanda?—dijo Steve, sorprendiendo a todos—¿No podrías leer sus mentes y darnos una pista? Esto se está haciendo tedioso.

—¿Quién te nombró capitán de la misión, Rogers?—se burló Wanda—Sabes muy bien que mis poderes están completamente descontrolados, desde lo que pasó con Barnes, nada ha salido bien.

Las pocas mujeres que quedaban dentro del proyecto Renegades eran forzadas a recibir tratamientos hormonales, para después ser regresadas a las habitaciones donde debían estar encerradas al menos dos horas con sus compañeros, en espera de que follaran. Dreykov estaba  desesperado por conseguir nuevos reclutas, tanto que había comenzado a ser permisivo con las niñas que cometían algún error.

—Tienes que intentarlo, para que podamos llegar con resultados—dijo Steve—Sabes que si no lo haces, no volverás a ver a Bucky.

Esa amenaza fue suficiente para que la morena comenzará a actuar; mostrando los poderes de la Bruja Escarlata en todo su esplendor. Wanda estaba brillando de una manera en la que pocas veces lo hacía, su cuerpo se elevó por los aires; dejando ver las líneas de poder rojo.

RENEGADES (ASTERIXBADBITCH)Where stories live. Discover now