En ocasiones te das cuenta que la persona a quien amas, es esa que estuvo cercanamente lejos.
Bella sabía perfectamente a quién quería, pero estaba claro que no podía dejarse llevar por sus sentimientos.
Y el inesperado acercamiento de Jasper Hale...
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Bella Swan
—Hola, Bells —me saluda Emma sentándose junto a mi en la mesa de la cocina.
—Emma, ¿estás bien? —inquiero al verla. Llegó hace media hora, solo pasó derecho diciendo que se daría una ducha y ahora que baja, se ve más pálida de lo habitual.
—Sí, Bells —hice una mueca ante su respuesta, pero ya no le insistí—. Vamos contigo, lo importante. ¿Cómo te fue con Jasper?
Solté un suspiro. Papá salió, así que no me preocuparía por hablar abiertamente del tema.
—Fue la mejor tarde que he tenido en mi vida —una sonrisa se extendió en mi rostro. Emma puso sus manos en sus mejillas para recargarse en ellas, siempre que quiere poner toda su atención en algo, hace eso—. Me llevó a una especie de cafetería, está un poco lejos de Forks, pero era muy hermosa. Tenía una sección donde puedes sentarte a leer los libros que estén ahí, e incluso hay primeras ediciones.
—¿Y cómo te sentiste?
—Tranquila, Emma. Y feliz —me sinceré—. Es extraño que hayamos salido solo una vez y sienta como si hubiera convivido con él durante años.
—Mi madre decía, que cuando encuentras a tu persona destinada, no importa el tiempo que lleves de conocerlo, sentirás que puedes confiar en él y lo demás pasa a segundo plano cuando estás con esa persona.
—Pero mi tía tardó meses en aceptar a tu padre —dice con el entrecejo fruncido.
—"Nunca les hagas creer que pueden contigo desde el primer instante, eso quita el interés y curiosidad que tienen en ti" —suelto una pequeña risa—. Los hombres cuando ven que tienen poder sobre una mujer, en ocasiones se llegar a aprovechar de esa confianza que les dan. Nunca dejes que se aprovechen de tu confianza e inocencia, Bella.
Que ella dijera aquello, me pareció extraño, en especial por la rabia en que lo dijo, aunque rápidamente ocultó eso, mostrando una gran sonrisa y cambiando de tema.
—Me alegra que hayas tenido un gran día, Bella. Lo mereces.
—Emma, él me gusta —expresé—, y mucho. Pero está con Alice, y ella es mi amiga, aún cuando haya decidido dejar la idea de convertirme, no he podido alejarme de ellos.
¿Qué puedo hacer?
Quisiera tener el valor suficiente para decirle a Jasper lo que siento, pero eso no solo implicaría que posiblemente se aleje de mí, justo ahora que ha empezado a acercarse, sino también, que lastimaría a Alice.
Solté un suspiro y moví mi cabeza para alejar ese constante pensamiento, que no es nada agradable y perturba mi mente mucho más tiempo que antes.
Miré a Emma, ella realmente se ve mal. Puedo sentir que tiene algo que decir, pues hace extrañas muecas, como si estuviera debatiéndose consigo misma. Cuando me decido preguntar sobre lo que le ocurre, llega papá.
