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《Se acercó cuidadosamente a la pequeña figura en el rincón, mientras esta temblaba de miedo. Su mano se posó cautelosamente en su hombro, estaba frío. Fijó su vista en su rostro, estaba cubierto por varios mechones de pelo que se pegaban a su...
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▬▬▬▬ LOS TRES ENTRARON AL DEPARTAMENTO.R'yleh fue directito a tirarse en la cama de Steven. Mientras este conversaba con la dichosa Layla, no quería parecer metiche, así que tomó sus audífonos y se los pusó, reproduciendo a Martin Gaye.
Mientras tanto, su mente reproducía esas imágenes de aquel recuerdo, una y otra vez. Inconcientemente, cerró los ojos, pudiendo ver, entre la oscuridad, la claridad de aquellas imágenes.
El cuerpo ensangrentado.
Sobre una alfombra roja, con mandalas trazados en su diseño.
Los libros manchados con la sangre de aquel hombre, que en un costado tiene una profunda herida.
Los cristales a los pies de una mesita, en medio de una sala elegantemente decorada, efectivamente, era una botella de vino. Podía oler la fragancia tenue del contenido.
El tren veía su pie trabado entre los tablones de las vías, un pitido, voltea, y tan solo se encuentra con los faroles del tren.
¿Quién era ese hombre?
¿Por qué lo asesinaron?
¿De quién.. ella escapaba?
Golpes abruptos en la puerta la hicieron abrir los ojos, Layla saliendo por la ventana la hizo fruncir el ceño, volteó a ver al azabache, quién le hizo señas hacia la ventana.
Ella rápidamente se levantó, dejando sus audífonos de lado. Salió por la ventana, colocandose al lado de la misma, junto a Layla. La saludó con toda la inocencia posible. Confundiendo ligeramente a El-Faouly, pero decidió devolver el gesto.
Ambas escucharon la conversación, en silencio.
R'yleh frunció el ceño al oír que arrestarían a Steven. Molesta y buscando defender la inocencia de Grant, casi sale a defenderlo, pero Layla la detuvo, negando con la cabeza ante sus anticipadas acciones.
