🌊Capítulo#16-Verdades💦

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-A-Niang.-llamó el peli castaño.

-Oh.-la hermosa chica se giró hacia los recién llegados.- A-Yi, bienvenido.-sonrió mientras escondía un plato de cristal tras ella.

-A-Niang ¿Qué haces aquí? ¡Se supone que deberías permanecer oculta!.-exclamó el menor preocupado.

Lan YiFei se acercó lentamente a su pequeño león y una vez frente a él le acarició la castaña cabellera.

-¿Cómo podría mantenerme escondida y dejar abandonado en este lugar a mi único bebé?.-la sonrisa permanecía en su rostro, mientras hablaba comenzó a jalar una de las mejillas del menor.

Los ojos de Yibo se llenaron de lágrimas, no era seguro afirmar si eran porque su madre salió del lugar donde estaban escondidos, o por el inmenso dolor que estaba sufriendo su pobre y regordeta mejilla.

-¡A-Niang! D-duele.-se quejó.

La madre se carcajeó y lentamente soltó la ahora roja mejilla de su bebé.

Yibo hizo un puchero a forma de protestas mientras se sobaba el lugar afectado, expresión que cambió al sentir algo suave y húmedo posarse con delicadeza en la adolorida zona. Zhan lo había besado.

El peli castaño observó a su mayor, una sonrisa se escapó inevitablemente de sus labios. El lugar donde anteriormente se estaba desarrollando la Tercera Guerra Mundial ahora se encontraba repleto de amor entre los dos jóvenes.

-Definitivamente, no me arrepiento de que hicieras ese amarre, será un honor tenerte como yerno Xiao Zhan.-la voz de YiFei rompió el cálido momento e hizo que las mejillas del menor se coloreando mientras el mayor reía.

-¿No ves que mi hijo es demasiado guapo? ¡Háblale con más respeto! Aparte de que es tu actual príncipe, él nunca hubiera considerado una opción tan mundana como el amarre, después de todo ¿Quién esta tan ciego como para ver tal belleza?.-ante el comentario de su padre Zhan apartó la mirada, digamos que si las cosas no hubieran sucedido así, la idea de un amarre...sonaba bastante tentadoras, aunque no iba a decir eso.

-¡No estoy hablando contigo Fengmian! ¡Por viejos como tú es que decidí venir a proteger a mi cachorro!-regañó la madre del menor.

-¿Cachorro?.-mientras sus padres discutían, Zhan le susurró a su Didi.-¿Te puedo llamar así también?-le preguntó entusiasmado.

-Sin comentarios.-respondió avergonzado ¿Por qué todos quieren avergonzarlo tanto últimamente?

-¡Sabes cuánto nos alegramos con las nuevas crías! Admito que actúe precipitado pero debes comprenderme.-se defendió el rey.

-¿Comprenderte? Desde que me fui de Yiling me ha interesado poco lo que suceda con ustedes, así que mejor mantente en silencio xiao A-Mian.-replicó.

-A-Fei.-Haikuan intervino con una sonrisa nerviosa.-calma, recuerda que él es nuestro rey.

-Corrección, es tu rey.-siguió insistiendo la chica Lan.

Los guardias estaban quietos en una esquina, nunca habían presenciado que alguien le faltará el respeto a su rey, mucho menos que se logrará imponer tanto al que consideraban su gobernador. Sobre todo, aparte de la reina y el príncipe heredero, absolutamente nadie ha logrado que adoptará una posición sumisa.

Poco a poco la paciencia del mayor de los dos jóvenes presentes se estaba acabando. Primeramente se encuentra con el pervertido y entrometido de Haoxuan, ahora para rematar nada más que llega a casa es recibido por una pelea provocada por su padre. Sino fuera porque su Didi estaba presente ya habría mandado de una patada a su progenitor de vuelta a Yiling.

Swimming in your LoveWhere stories live. Discover now