CUESTIÓN DE PIEL - VANICA

¿Destino o casualidad?

Narra Mónica:

Como era de esperar, me levanté al otro día y aún no tenía noticias de Vanesa. No quiero pensar cosas que no son y muchísimo menos tener que depender de sus mensajes. Ni siquiera somos algo como para insistir. Hemos pasado una linda tarde, una cena y una noche juntas, nada más.

Me fui a trabajar, no sin antes haber revisado las redes sociales. Inconscientemente busqué el usuario de Vanesa en instagram pero tampoco había subido nada. <<Si le pasa lo mismo que a mí ya me escribirá>> pensé. No quiero molestarla, no quiero que piense que soy una pesada y mucho menos quiero que perdamos esta "amistad" por una confusión.

Aparqué el coche y me dirigí hacia la entrada de Antena3. Estaba a punto de entrar hasta que alguien gritó mi nombre y me volteé para ver quién era.

-Ana- Grité y corrí a abrazarla.

-Hola, Moni- dijo ella correspondiendo a mi abrazo.

-Qué sorpresa- dije -¿Cómo estás?-

-Bien- respondió con una enorme sonrisa. -¿Y tú? Hace tanto que no nos vemos, amiga- me dijo y volvimos a abrazarnos.

Ana Pastor es una gran amiga y compañera de profesión con la cual compartí mis primeros años como periodista. Hacía varios meses que no nos veíamos. Estábamos en contacto mediante redes pero por nuestros trabajos y vidas atareadas, nunca quedamos.

-¡Cuánto tiempo Ana!- le dije al entrar juntas al canal.

-Demasiado- me respondió ella.

-¿Y qué te trae por acá?- le pregunté muy curiosa. Realmente me sorprendió su visita.

-Vengo a una reunión sobre un nuevo proyecto, un programa, todavía no hay nada oficial pero estamos en eso- me respondió sincera.

-Wow, que emoción. Vamos a poder vernos más seguido- dije y ambas sonreímos.

-Estoy llegando tarde, si quieres almorzamos juntas. Te espero y cuando termines el informativo te busco por tu oficina- propuso y al decirle que sí se fue casi corriendo.

Comenzó el primer informativo del domingo, como siempre, Matias lo hace todo un poco más divertido. Presentamos las noticias y al finalizar me dirigí a mi oficina dónde seguramente ya estaría Ana esperando.

-Ya estoy, deja que me cambié los zapatos y vamos a almorzar- dije apurada al entrar.

-Tranquila Moni- dijo sentada en el sofá

Me puse unas zapatillas más cómodas, cogí mi bolso y nos fuimos a un restaurante que se encuentra a pocas cuadras de Antena3.

-¿Cómo fue?- le pregunté mientras esperábamos la comida.

-Bien, todavía falta ultimar algunos detalles pero creen que todo estará listo para fin de mes-respondió ella.

-Me alegro mucho- le dije sincera mientras hacíamos un pequeño brindis.

-¿Y tú qué?- me preguntó curiosa alzando las cejas.

-¿Y yo qué?- le pregunté sin entender a qué se refería.

-Que desde esta mañana que te vi bajar de tu coche no dejas de sonreír. Has conocido a alguien ¿verdad?- me dijo.

-Tantos años y no has perdido el don de la intuición- le respondí y ambas reímos.

-Entonces sí, conociste a alguien- confirmó satisfecha mi amiga.

-Si. Tampoco tenemos una relación, es una amiga, tampoco sé si cuenta como amiga.- respondí alborotada y bastante nerviosa.