15.

21 5 1
                                    

A mitad de semana el abogado viene a platicar conmigo de los detalles de la denuncia, todo está prosiguiendo como corresponde, pero ahora es Roberto el que no aparece, aún con la orden que tiene para que se presente, nadie sabe nada de él. Tengo un poco de tranquilidad, pero no me da la seguridad que necesito, prefiero que pasen algunos días, comunicarme con quien necesito pero no comenzar a mover piezas hasta que sea necesario. El despacho también me envío una orquídea con una tarjeta felicitándome por el comunicado, pero sobre todo por denunciar. Claro que la trajo en persona mi abogado sin envíos de por medio.


Octavio llega más tarde, hoy tendremos una sesión juntos, con Theo, pero no psicológica, esto es algo para hablar de nosotros, de lo que sentimos, de lo que pensamos de esta relación que decidimos tener. Creo que es la primera vez que me emociona tener una sesión de esta manera, es complicado de explicar, dado que ni siquiera sé con exactitud el objetivo, pero si sé que deseo. Conocerlo, hablar, expresar todo lo que siento en este momento, no por seguridad, sino por intimidad de la relación.



La semana termina y todo se vuelve un poco más tranquilo, sé por Emma y Marco, que están monitoreando, que han salido las notas que pedí me ayuden a tener en redes sociales y en televisión, le están dando seguimiento al caso, así como publicando algunas imágenes especificas, necesitamos dar pistas falsas, no al público, sino a los contactos de Roberto, porque no solo él es ahora una amenaza, sino a las personas que seguramente contratará, tener el espacio para el momento en el que pueda dar legalidad de lo que pasó, porque sí, hice mi denuncia, sí tengo testigos, fotos, moretones que inclusive en este momento apenas están sanando, pero para la justicia de este país es necesario algo mayor para hacer su trabajo. Es por ello que necesito hacer ruido, sino es por las pruebas, será porque se haga mediático, ya no me importa que las personas sepan lo que me ha pasado, por el contrario, quiero que conozcan que hay personas que viven con obsesiones, traumas e inclusive tendencias sociópatas. No deseo callarme, ya no, por el contrario, deseo que mi voz pueda ser escuchada.


* * * * *

Evito algunas de las cosas fuera del centro, ya que Octavio ha estado aquí, no viene como mi psicólogo, sino como mi novio, es extraño escuchar esa palabra, pero me encanta sobre manera, gracias a qué es uno de los socios más de un día se queda a dormir conmigo, decir que no siento cada día mucha más paz y me siento más como esa Michelle Bianchi que siempre he sido, sería mentira, no sé que hace este hombre que me ayuda a volver a sentirme fuerte, consiente, pero sobre todo que estará bien. Lo he dicho con Theo y entiendo que estoy en esa fase de enamoramiento, pero más que otra cosa que estoy viviendo una relación a su paso, con un hombre al que quiero y admiro, ayudándome a seguir con todo este proceso, cómo el dice, por mi, por mi salud mental, para así poder detectar y hablar cuando algo no me gusta, cuando mi voz está siendo callada, cuando ya no me sienta como yo misma. Pero sobre todo, volverme a sentir amada.


* * * * *

Dos semanas después valoramos el que salga, hablo con las partes, por consenso y porque así lo deseo, estaré en casa de Octavio, no habrá visita de nadie hasta que tengamos un poco más de paz, Marco ha dejado todo listo pero es necesario que vaya a esa casa, piden algunas firmas y aunque ya han traigo papeles y los he firmado previamente, la administración del condominio me pide que vaya a hacerlo en persona, dado que estará sola la casa por no sabemos cuanto tiempo.

Obsesiones ©Where stories live. Discover now