ᴘᴏᴇᴛɪᴄ ɢɪʀʟ |ꜱᴀɪᴅᴀ|

Twenty Six

–Oye– El golpe en mi puerta me hizo brincar.–¿Vas a quedarte aquí todo el día?–

Estaba acostada en mi cama, metida entre mis cobijas, leyendo el último libro de los tres que me había prestado Dahyun.

–Sí– Dije sin ganas.

Escuché el pesado suspiro de Nayeon. Y sus pasos entrando, sentándose en el borde de la cama.

Yo la ignoré y continué leyendo.

–Sana...  Deberías dejarla ir ¿No?–

–¿Ah?– Bajé el libro y la observé.

–Digo... Verte, así desanimada. Sana han sido dos meses. Mina y yo estamos preocupadas–

Negué ligeramente.

–Oh, no es eso lo que me tiene así–

Nayeon Volteó el rostro incrédula con una expresión de "No te lo crees ni tú"

–Ok. Admito que estoy un poco... Bien, he estado triste desde que ella se fue–

–Llorabas todas las noches– Frunció el entrecejo.

–S-Solo necesitaba desahogarme– Hice un puchero– El caso, es que no es eso... H-Hoy en la U, vi a Momo–

–¡¿Regresó?!– Nayeon estaba entre nerviosa y molesta.

–Al parecer– Suspiré– La vi a lo lejos–

Nayeon bufó. Se levantó de la cama, estirándose un poco.

–Tendremos cuidado. Traeré más ropa de mi departamento–

–Nay, no hace falta. No digo que me moleste que estés aquí, tu compañía y la de Mina me ayudan mucho. Pero, está bien–

–No jodas, Sana... No voy a dejarte sola después de saber que Momo volvió de Japón– Traeré comida, alcohol y a Mina... También a Jeong, sí–

–P-Pero–

Asomó la cabeza.

–Hey, y ¿Sí aprovechas para... No sé, entablar algo con Mina? Es muy hermosa, encantadora y muy sexy–

Yo solo rodé los ojos y sonreí.

Tomé nuevamente el libro, ya estaba pronto a terminarlo y no podía esperar a leer la última página.

"Pronto, Sana."

Sentí una presión en mi pecho y una emoción inmensa creciendo dentro de mí.

°°°

Me desperté en mi cama, sentía una presión en la pierna y otra en el pecho. Era imposible que aún teniendo una cama tan grande, despertaba siempre con Nayeon casi encima. Era como un koala. Por otro lado, Mina, era diferente, estaba acostada a mi otro lado, a una distancia normal y con su tierna pose para dormir.

Después de que Nayeon trajera a la nipona y a su amiga de cabellos cortos. Tuvimos una noche, llena de juegos y películas. Jeongyeon se fue al otro día y este par decidieron quedarse una vez más. Resultando en nosotras tres durmiendo en mi cama.

Porque... Palabras de Nayeon. "¡Tú cama es más grande que mi ego!" Y después de aquel chiste tan pésimo que de todos modos hizo reír a la Mina, accedí a que durmieran ambas conmigo.

–Im... Quítate de encima– La empujé contra el borde de la cama.

Dormida, dio dos vueltas y volvió a pegarse a mí como un chicle.