12| Date la oportunidad.

843 107 41
                                    

Feliz de alegrarte los días con mis actualizaciones. _jeonniee3

"Dos almas jamás se encuentran por casualidad."

"—Tus manos son... muy cálidas, por cierto.

Bum.

Bum.

Un suspiro salió de mi logrando que cerrara mis ojos suavemente.

—N-no digas eso.

—¿Porqué?

Bum.

Bum.

Porque me pones más nerviosa.

—Por que- dioses, tengo que irme, y-y tú también deberías hacerlo —abrí mis ojos dando un paso atrás.

Necesitaba alejarme de él, aunque sea un poco.

—¿Ahora serás la chica que huye en lugar de la que extravía su cartera? —bromeó haciendo que riera un poco.

—Puede ser.

—Nos mensajeamos más tarde, entonces."

—¡Ah! —un grito exasperado salió de mi garganta sin importar que se escuchara en todo el departamento. Quité de mi cara la almohada mirando el techo para después poner mis manos nuevamente sobre mi cara.

Me sentía avergonzada, de todo lo que había pasado el día de hoy, me sentía nerviosa por salir con Namjoon, e incluso tenía una sensación muy rara dentro de mi pecho.

Quizá eran... ¿mariposas?

No, no, no.

Era lo menos que podía ser.

¿O sí?

Volví a quitar de la cara mis manos y me levanté en dirección a la pequeña cocina que había en el departamento, tomé un vaso para llenarlo de agua y después encaminarme hacía la sala de estar donde se encontraban las flores que hace una semana me había regalado él.

El pequeño ramo de claveles y tulipanes lucía tan bonito como desde el primer día, cosa que inclusive me puso a cuestionarme que tan cierto era aquello que decían: "cuando alguien te da flores, duran y florecen bonitas durante semanas, es porque lo han hecho con amor".

¿Namjoon me habrá dado el ramo con amor? ¿O solo era buena cuidando flores?

Sacudí mi cabeza ante las tontas preguntas que me hacía.

Por que si, si eran tontas.

Regrese a tumbarme a la cama boca arriba y mirar el techo blanquecino una vez más, palmee la cama hasta encontrar mi celular y busqué en mis contactos el número de alguien que podía ayudarme en esta situación.

El sonido de espera se escuchaba a mi oído cuando al cuarto, su voz logró hacer eco.

Debió suceder un milagro, ¿encontraste al amor de tu vida?

—Dioses, cállate... —susurré cerrando mis ojos.

Tú me has hablado, y con lo que me has preguntado hace unos días, me he puesto a pensar en ello-

—Lo encontré, Jin —interrumpí la gran suposición que había hecho. —pero no es el amor de mi vida, es un empresario cuatro años más grande que yo, con bonita sonrisa, que se ha ofrecido a ayudarme con mi tesis, me defendió y me invitó a salir —hablé lo más rápido posible esperando que mi amigo no entendiera nada de lo que había dicho.

Coffee shop «Kim Namjoon»Where stories live. Discover now