Destinado a amarte

22

— Ah. Maldición. Tharn, más despacio.

Type se aferró con fuerza a la cabecera de la cama, empujando su cadera hacia el lado contrario para sentir cómo Tharn accedía por completo antes de volver a deslizar su miembro hacia fuera y embestir con fuerza antes de terminar de salir, empujando el punto en el que el moreno temblaba.

Era la tercera vez que lo hacían, el calor de sus cuerpos no podía ser enfriado por la helada corriente del aire acondicionado. La cama estaba hecha un desastre, pero ya habían utilizado la otra en dos ocasiones, dejándola completamente húmeda.

— A-ah.

Type apretó la mandíbula en un último gemido mientras se liberaba. Tharn dio a su vez una última embestida y salió para liberarse en medio del trasero del moreno quien no se molestó en cambiar de posición, quedando recostado boca abajo con su novio acostado sobre él.

Su novio. No tenía caso avergonzarse de lo que ya estaba hecho. Suficiente vergüenza había pasado declarándose en público como para ahora sentirse tímido con esa palabra.

Estaba recuperando el ritmo de su respiración con los ojos cerrados cuando sintió cómo el castaño comenzaba a depositar pequeños besos en su cuello y espalda. Desde que habían vuelto Tharn no había dejado de sonreír como tonto, mostrando solo otra expresión cuando lo penetraba, permitiéndose disfrutar como nunca.

Después de unos minutos, comenzó a quedarse dormido una vez que calmó su respiración y disfrutó de la nivelación de temperatura de su cuerpo, sintiendo el sudor ahora fresco. Juntando eso con los sonidos y las sensaciones de los besos y las manos de Tharn acariciándolo, podría haber perdido la consciencia en cualquier momento, pero fue traído de regreso por la voz del castaño quien le susurró cerca de su oído.

— ¿Quieres hacerlo de nuevo?

Más que una pregunta fue una sugerencia. Type sintió que el miembro de Tharn volvía a ponerse duro en medio de su trasero.

Estaba considerando empujarlo para quedar sobre él cuando escuchó a alguien golpear con fuerza la puerta.

— ¡Vayan a un maldito motel!

En lugar de cohibirse, el castaño volteó a verlo de manera seductora.

— ¿Deberíamos?

— Estás loco, quítate —empujó el cuerpo del otro con todas sus fuerzas.

Nuevamente se sintió completamente avergonzado y su rostro no podía estar más rojo, aunque era difícil saber si ese era el motivo o si se debía a la sesión de sexo intenso desde que regresaron al dormitorio.

Sea como sea, el culpable es el mismo.

Type planeaba dormir solo en su cama una vez que Tharn terminara de cambiar las sábanas, pero el otro era igual de insistente que siempre y terminaron durmiendo en la misma cama, con Tharn abrazándolo por la espalda. Esta no era la primera vez que se acostaban en esa posición, pero a diferencia de las primeras veces, el moreno ahora estaba casi acostumbrado a esto, podría incluso admitir que descansaba mejor de esa manera.

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El cuerpo de Type se sentía pesado debido a toda la actividad física de la noche anterior, eso junto al peso del cuerpo de Tharn quien estaba casi por completo sobre él, usándolo de almohada.

Pudo haber seguido durmiendo de no ser por el ruido de una notificación de su celular. El sonido personalizado le hizo saber que se trataba de la aplicación de su cuenta de banco. Su papá le había depositado dinero.

Se sentó con algo de esfuerzo, resignado a tener a Tharn abrazándolo con fuerza para que no se alejara, entonces buscó el contacto de su papá para marcar.