El amor llegó a papá

Capitulo 25

Ahora solo esperaban que naciera los gemelos, Sasuke había entrado n labor de parto hacía dos horas pero estaban esperando que dijeran que estaba la listo.

Incluso había maldecido a Naruto por lo menos unas 30 veces, a lo que el rubio solo acariciaba su espalda, reconfortandolo.

Al ser gemelos el Uchiha tendría una cesárea, esperaba que no doliera tanto, lo metieron a quirófano y Naruto detrás de él, con el equipo necesario.

Fueron momentos de tensión, Sasuke parecía estar dormido con la anestesia, mientras Naruto estaba nervioso.

— Tengo al primer bebé; es un niño — anunció la doctora, para que una enfermera le entregará el bebé a Naruto, quien se acercó al azabache..

— Dios, Sasuke —murmuro viéndolo con atención.

El bebé tenía un ojito entreabierto, dejando ver el color azul de este, su piel tostada como la de Naruto, cabello negro y marquitas en las mejillas.

No tuvo tiempo de reaccionar cuando se escuchó el llanto del segundo bebé.

La enfermera tomó al pequeñito antes de colocar en brazos de Naruto al bebé — Es una niña — mencionó la doctora con una sonrisa.

— Eres muy bonita tteba — el rubio estaba fascinado con la pequeña, frotó su mejilla contra la de la bebé — Sasuke,  es casi igualita a ti — dijo fascinado con la bebé, quien era de piel nivea igual que Sasuke, cabello rubio y ojos negros.

— ¿Te molesto si la acercas? — murmuró con voz cansada Sasuke.

— Lo siento tteba — se inclinó para que su esposo viera a la bebé.

— Que pequeña — intento tocarla, aunque solo sujetó su manita por un segundo.

— Se los tienen que llevar, cuando estés en tu cuarto, los llevarán contigo Sasuke — informó Tsunade, limpiando antes de comenzar a suturar.

Se llevaron al cuarto a Sasuke y cuando despertó un par de horas más tarde, quedó confundido al ver todo blanco.

En definitiva no estaba muerto, porque la cintura le dolía horrores, salió de sus pensamientos cuando escuchó la puerta abrirse.

— Hola amor — entró con un ramo de flores pequeño que puso a un lado del Uchiha — No te preocupes, van a traerlos en un momento.

Después de un rato entró la enfermera con ambos bebés, entregandole uno a Naruto y otro a Sasuke.

— Son como una mezcla de nosotros tteba — murmuró impresionado con sus bebitos, ambos eran pequeñitos y la ropa les quedaba grande, cosa que los hacia verse más tiernos.

— De algo sirvieron los mareos y todo eso — aclaró con una sonrisa enternecida — Aunque parecía una albóndiga con pies.

— Claro que sirvieron, gracias Sasuke — se acercó tanto su mentón para plantarle un beso — Gracias por aparecer en mi vida y hacerme papá de tres.

— No tienes que agradecer, te amo — murmuró antes de prestar toda su atención a los bebés.

— ¿Que nombres tendrán — preguntó en voz baja, pegando a la bebé a su pecho.

— Bueno...Sarada tiene nombre de ensalada ¿Que te parece para el niño Menma? — murmuró con los ojos brillantes, esperando ansioso la respuesta de su esposo.

— Menma — repitió mirando con atención al bebé — Está bien, Menma será aunque eso sea un bambú seco del ramen — sonrió enternecido después de un gesto curioso— Es verano y es muy bonita, le queda Natsumi — acarició la pequeña mejilla regordeta de la bebé.

— Tenemos dos que se parecen a ti — tomó una mejilla de Sasuke e hizo lo mismo que él.

— Y dos iguales a ti — respondió el cumplido.

Ahora sí, su vida estaba completa, tenían una familia, cuatro hijos hermosos, no podrían pedir nada más.