Casada con el Jefe de la Mafia

Cap 22

Narra Estefania.

Un mes ha pasado un mes en el cual Máximiliano me ha demostrado que es una buena persona y un buen hombre, estoy pensando en confesarle mis sentimientos y decirle que lo amo ya no puedo callar más esté amor que siento por el.

–En que tanto piensas–Dice Yoselyn.

–Nada importante jeje–Dije.

–Ya casi es tu cumple nena pasado mañana ya pensaste que te vas a poner–Dice Yoselyn entusiasmada.

–Aun no creo que uno de mis vestidos.

–Nos iremos de compras hoy mismo, toma tu bolso y vamossss.

–Bueno está bien solo por qué tú lo dices jaja.

Tomé mi bolso y nos subimos a una de las camionetas Yoselyn trajo a su pequeño hijo con nosotras.

–No le avisé a Max pero no creo que se moleste–Dije preocupada.

–No se molestará tu tranquila este día será de compras!!!

El chófer llegó muy rápido al centro comercial, entramos a muchas tiendas pero ninguna fue del agrado de Yoselyn hasta que entramos a una muy elegante con vestidos hermosos y brillantes.

–Esta es la indicada ven!

Me jalo del brazo y nos adentramos a la tienda de ropa.

–Que te parece este–Dice Yoselyn.

–No es muy corto y parece funda de almohada–Dije entre risas.

Una de las trabajadoras se acercó a nosotros mirando feo, nos miraba de arriba abajo especialmente a mi.

–Jovencitas no pueden estar tocando la ropa es de tela sumamente fina y un rasguño la puede romper–Dice la trabajadora en un tono muy elevado.

–No hemos tocado nada solo miramos los vestidos–Dice Yoselyn.

–A esta tienda solo entran personas de clase alta si solo entraron a ver retirense por favor.

–Disculpa?–Dije ya enojada.

–Salgan de mi tienda por lo que veo ustedes no tienen dinero para pagar nuestros vestidos.

Tenía un tic en el ojo de lo enojada que estaba por culpa de esta chica, quien se cree para tratar a los clientes así?

–Señoritas salgan de mi tienda por favor es una orden o llamaré a seguridad de seguro tomaron algo que no es de ustedes.

–Enserio crees que te robamos? De mejores tiendas nos han corrido–Dije.

–Es verdad está tienda es muy amm pequeña nosotras estamos acostumbradas a las grandes ropas de marca–Dice Yoselyn.

–Jajaja grandes marcas por favor de seguro tu eres una madre soltera y tu una becada universitaria jajaja.

–Mira lo que hago con tu vestido de tela sumamente fina–Dije para después romper el vestido por la mitad y tirarselo en la cara.

–¡Hija de puta! Cómo te atreves a romper ese vestido es de una marca costosa!!!

–No es tan lindo parece funda de almohada además está tela huele a basura iuuu esto le vendes a tus clientes–Dije ya enojada.

–Seguridad!! Seguridad!! Alguien venga y saque a estás piojosas de mi tienda.

Me lanza contra ella, callo al piso y yo arriba de ella cacheteandola fuertemente incluso gritaba de dolor.

–Sueltameeee!!!!–Decia.

Seguí cacheteandola hasta que ella se levantó y jalo mi pierna haciéndome caer, jalo mi cabello fuertemente y se me escapó un "aush" me pero fuertemente en la nariz haciendo que mi nariz sangrara, mi enojo explotó y con mucha fuerza me levanté y la empuje hacia la pared fuertemente, golpie su nariz varias veces hasta que quedó ropa y morada llena de sangre, no era suficiente para mí, con mi rodilla le pego en su estómago y callo retorciéndose de dolor y llorando, seguí pateandola muy fuerte y rápido hasta que quedó inconsciente la perra.

–Esto te pasa por quererte meter conmigo perra–Dije y le di una última parada pero está vez en la cabeza.

–¡ESTEFANIAAAAA!!!!!–Grita Yoselyn–¡ESTA MUERTA ESTEFANÍA!!!

–Mejor que esté muerta está hija de perra–Dije mirándola.

El sonido de la sirena se escuchó y dos policías entraron a la tienda y miraron a la mujer tirada en el piso sangrando.

–¡Arrestenla! Y llamen a una ambulancia rápido!!–Dice un policía.

Me pusieron las esposas y a empujones me llevaron hasta afuera, dónde ya había miles de personas mirando como me subían a la patrulla, no me arrepiento de haberle echo se lo merecía, si mate a dos hombres por defensa propia golpear a esta mujer naaa.

–¡ALTO!–Una voz masculina que conocía bastante bien se escuchó.

–Lo siento señor ella agredió gravemente a una trabajadora–Dice un policía.

–A mí me vale madres si agredió a una trabajadora sus razones tuvo usted no sabe quién soy y es mejor que la suelte ahora mismo–Dice Máximiliano.

–Lo siento señor pero la ley es la ley.

–¡A MI NO ME IMPORTA LO QUE DIGA LA MALDITA LEY SUELTE A MI MUJER Y VAYASE O LO MATO AQUÍ MISMO!–Dice Máximiliano, un grupo de camionetas negras llegaron y los policías me quitaron las esposas dejándome libre.

–Lo siento mucho señor yo solamente cumplía con mi trabajo–Dice el policía.

–Muchachos llevense a estos imbeciles–Dice Máximiliano.

–No Máximiliano no lo hagas ellos no hicieron nada, solo hicieron lo correcto–Dije.

–Te estaban arrestando eso es correcto!? No Estefanía no es correcto si eres mi mujer.

–Maximiliano por favor calla nos están viendo todos!

–Me vale madres que nos vean todos, todos aquí saben quién soy y nadie escuchame bien nadie puede tocarte ni un solo pelo.

–No puede ser usted es Máximiliano Harrison!!!!–Dice un policía–Cuanto lo siento señor yo no tenía idea que era su esposa.

–Ahora lo sabes pendejo.

Los policías se van rápido al igual las personas que miraron toda la escena, mire mis manos y estaban manchada de sangre, oh no.

–Vamonos a la casa ¡AHORA!–Dice Máximiliano.

Me senté en el asiento del copiloto, Yoselyn se fue en otra camioneta junto a su hijo y yo con Máximiliano.

–Pense que habías cambiado creí que ya no hacías ese tipo de escenas como la vez del ladrón!!! Pudiste haberme metido en problemas puta madre–Dice Máximiliano.

–Pude haberte metido en problemas clarooo!! Solo estás pensando y pensando en ti en lo que está bien para ti el que dirán para ti todo para ti!–Dije furiosamente.

Algo dentro de mi se sintió triste y enojada a la vez, pensé que habíamos hecho las pases y hoy todo lo logrado se hecho a perder de nuevo.

Continuará....