Cap 57

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Narra Estefanía.

No por favor no puedes nacer en este momento, no es el lugar ni la hora solo tienes 7 meses!!!

-Ya va a nacer-Dice la mujer.

-No puede nacer solo tengo 7 meses.

El dolor comenzó a pasar y era la oportunidad perfecta para salir me despedí de la mujer y salí de esa habitación.

Afuera estaba Marino y los guardias era la hora de rescatar a Maximiliano.

-Ahora si llego la hora-Dije.

Todos tomaron su ametralladora y caminamos derecho, no me iba a mover de aquí sin ti Maximiliano.

Era el pasillo número 12 aquí debe estar Max, dos hombres con máscara estaban cuidando una puerta de cristal y adentro se podía ver una persona atada en una silla.

Dispare hacia la puerta y al instante calló en pedazos los dos hombres intentaron disparar pero les dispare rápidamente, hice a un lado sus cuerpo con mi pie y entre apuntando a un hombre pero está era diferente al resto, estaba vestido completamente de rojo.

-Te doy 5 segundos para que me digas en dónde está Maximiliano-Dije apuntando.

Todos apuntamos hacia ese hombre y el voltea, traía una máscara de diablo en su cara.

-Aqui lo tienes-Dice quitando una bolsa de la cabeza que tenía la persona que esta atada.

Mis ojos se cristalizaron de lágrimas después de tanto tiempo lo tengo frente a mi, mis lágrimas salían por si solas y el estaba en la misma situación que yo.

-Mi amor...

Dice Max débilmente.

-¡QUE LE HICISTE PENDEJO!-Le grite en la cara.

-Nada malo solo le dimos un par de golpes hasta dejarlo inconsistente esperaba que llegarás para matarlo frente a ti-Dice el hombre.

Todos recargan su arma para dispararle.

-Oh no quiten esa idea de matarme por qué si ustedes me disparan está prisión volara en mil pedazos.

Muestra un botón rojo en sus manos, solo explica que hay un explosivo.

-¡SUELTALO!

-No querida estás sorda o que ya te dije que lo voy a matar frente a ti.

Toma una navaja y la encaja en su brazo.

-¡Ah!-Grita Max de dolor.

-Mira Max todo lo que te perdiste por estar aquí-Dice señalando mi vientre.

Max solo baja la mirada y llora..

-No Maximiliano no lo hagas es lo que quiere este pendejo.

Me acerque a él y lo mire a los ojos, se miraba tan destruído....

-Fui un idiota al fallarte Estefanía perdóname-Llora más fuerte.

-Asi te quería ver Maximiliano llorando frente a mi sintiéndote culpable-Dice el diablo.

-¡Ah!-Me queje de dolor en el vientre.

-Aww ternurita al parecer toda la familia quiere estar presente-Dice tocando mi vientre pero quitó sus manos.

Maximiliano levanto su mirada y me mira de pies a cabeza dándose cuenta que mi vientre creció.

-Te ves hermosa-Dice.

-Gracias...

El diablo saca su celular y pone un vídeo donde se escuchan gritos y llantos de personas.

-Escuchan eso-Dice.

Se ríe a carcajadas y rasca su cabeza.

-Son sus familiares siendo torturados incluyendo a tu pequeño hermano Estefanía.

Mi corazón palpito fuertemente y sentía que al oxígeno me hacía falta, no mi familia no ella no tiene la culpa de nada.

-Si Max accede a dejarme el puesto los dejaré libres-Dice.

-¡DEJALOS ELLOS NO TIENEN LA CULPA DE NADA PENDEJO!

El solo ríe más fuerte...

-Miren cómo me divierto-Dice el diablo.

Muestra un vídeo donde Laura está siendo cortada con navajas y suplicaba que pararan. Despues muestra otro donde golpean a mi padre fuertemente hasta dejarlo inconsistente y a Joselyn la quemaban con cigarrillos....

-¡ERES UN MALDITO!

Tomé la pistola y apunte hacía el.

-No lo harás cierto-Dice el diablo.

No debo tener piedad de nadie...

Menos de este cabron.

Dispare en todo su cuerpo hasta que calló al piso, seguí disparando y por último dispare en su corazón.

Tomé un cuchillo y lo apuñale gritando de coraje y tristeza por todo lo que estaba haciendo.

-¡ESTEFANÍA!-Habla al fin Max.

Los guardias ya lo había desatado, lo abrace fuertemente y ambos lloramos. Lo mire a los ojos y acaricie y el acaricio mi rostro dándome un beso en la frente.

-Gracias mi amor-Dice.

-No tienes idea de cuánto te extrañe-Dije rompiendo en llanto.

Miro mi abultado vientre y sonrió al verlo, bajo su mano y movió su mano en círculos acariciando a nuestra hija.

-No puedo creer que en tu estado hayas venido.

-No podría dejarte Max eres todo para mí-Dije sonriendo.

Le di la orden a Marino para que dejaran ir a nuestros familiares, me quedé más tranquila al saber que estaban a salvó y ahora Maximiliano está conmigo y nada nos va a separar de nuevo.

-Te convertiste en toda una Jefa-Dice Max.

-Lo aprendí del mejor.

Después de tanto tiempo al fin estamos juntos tanto sufrimiento y lágrimas derrame por su ausencia.

-Todas las noches pensaba en ti-Dije.

-Y yo en ti preciosa no hubo un maldito segundo sin extrañarte.

-Desde tu ausencia pasaron muchas cosas el negocio sigue igual de bien que cuando tú estabas a cargo-Dije sonriendo.

-Sabia que podía confiar en ti.

-La nueva droga ya está siendo vendida y hemos ganado millones, solo cambie algunas cosas espero no te moleste...

-Molestarme no para nada mi amor-Dice sonriendo.

-Me sentía indefenso en estos momentos no sabía que decir ni que hacer pensé que era mi fin hasta que llegaste tu...

-No podría dejarte solo Max se que no nos conocimos de la mejor manera te odie en el primer día pero hoy te amo con todo mi ser y si tú no estás a mi lado me siento incompleta.

Coloca uno de mis mechones detrás de mi oreja dejando mi cara descubierta y se acerca a mi.

Extrañaba tanto esto...

Sus labios se unen a los míos en un beso lento lleno de muchas emociones, olvidaba lo perfecto que encajaban nuestros labios al besarnos lo extrañaba tanto no quería moverme de aquí solo quería besarlo una y otra vez un beso por cada día que estuvimos separados.















¡PUM!(Sonido de disparo)


















-¡NOOOOOO ESTEFANÍA!







Continuará...

Casada con el Jefe de la Mafia Where stories live. Discover now