Cap 48

17.1K 861 32
                                    

Narra Estefania.

Llegó el momento que más me aterraba, ver a sus enemigos en el lugar que se encuentran, una y otra vez se escuchaba una pregunta en mi mente ¿Esta Tamara? Estará muerta o viva creo que lo tengo que descubrir.

Ya estábamos llegando al lugar, es muy alejado de todo incluso más alejado del laboratorio, llegamos en un par de minutos y al bajarme me di cuenta que no había nada solo tierra.

–Marino creo que hay un error en el mapa –Dije.

–Ninguno mi señora–Marino jala una palanca que parecía un palo de madera de árbol y se abre una puerta secreta con escaleras subterráneas.

–Por algo lo llamamos el infierno–Dice.

El bajo primero seguido baje yo, es un lugar muy tenebroso había muchas celdas con esqueletos con ropa y manchas de sangre era sacado de una película de terror.

–Eso es espantoso–Dije.

–Los prisioneros están en la última celda–Dice.

–Pense que estaban separados.

–No mi señora, están juntos–Dice.

Llegamos a la última celda, solo había una puerta no tenía ventanas y estaba totalmente oscuro, Marino abre la puerta y un fuerte olor desagradable sale desde adentro.

Marino encendió las luces desde un apagador que estaba afuera y lo que mis ojos miraron me traumatizaron....

Estaban solo en ropa interior...

Sus brazos y piernas estaban clavados a la pared....

2 de ellos tenían los labios cosidos.....

Sabía que Máximiliano era como el demonio pero por lo que veo es mucho peor.....

Una persona llamo mi atención, era una mujer estaba calva y su rostro desfigurado, su aspecto era muy desagradable se podían notar sus huesos y tenía muchos golpes en su cuerpo.

Estaba en shock, no sabía que decir solo los miraba muy sorprendida.

–Lo lograste–Dice la mujer con una voz casi susurrando.

–Ah que te refieres.

–Tienes todo lo que nunca pude tener–Dice la mujer.

–¿Te conozco?–Pregunte.

–Oh por supuesto que sí me conoces perfectamente y por tu culpa estoy en este estúpido lugar y ¡SOY UN MONSTRUO!

–Ten cuidado como le hablas, estás hablando con la jefa–Dice Marino.

–Habla de una vez quien eres–Pregunte.

La mujer estaba quemada de la cara y todo su cuerpo.

–Soy Tamara y no tienes idea de cuánto te odio.

Tamara....

Jamás pensé que terminaría en estás condiciones, ella era la típica mujer preocupada por su belleza que moría por un par de zapatillas además su cuerpo estaba lleno de silicona.

–Tamara....

–Si soy esa misma ahora por tu culpa soy fea y asquerosa nadie jamás me va a querer–Dice.

–No mereces el amor de nadie y nunca lo tendrás por qué jamás saldrás de aquí–Dije.

–Ojala te hubiera matado cuando te secuestraron, estaría en tu lugar y no en este lugar–Dice entre dientes.

–Pero no pudiste matarme ya ENTIENDELO siempre fui mejor que tú–Dije riéndome.

–¡PUDRETE!–Dice.

Reía a carcajadas, lo disfrutaba ella estaba ahora bajo mi poder al igual que todos los de aquí.

–¡OJALA SE MUERA ESE BASTARDO CUANDO NAZCA!

–La única que se va a morir eres tú–Le dije.

Tomé mi pistola cargada y apunte a su cabeza.

–No por favor....

–Eso! Pideme perdón así te quería ver maldita.

–No puedes hacerme esto por favor no Estefanía–Dice llorando.

–Deseaste la muerte de mi hijo, pero ahora yo me encargaré de la tuya.

El sonido del disparo se escuchó por todo el subterráneo, la bala impacto su cabeza y al instante murió, una menos...

Guarde la pistola y salí de ese lugar, una nueva vida a comenzado y está vez no creo poder parar pero mi principal objetivo es encontrar Máximiliano.

Narra Máximiliano.

Mientras leía una de las revistas que Osvaldo trajo llegó el Diablo y me miró fijamente.

–Asi que tú eres Máximiliano–Dice.

–Se te ofrece algo–Pregunte sarcástico.

–Tu mataste a mi hermano.

–Lo disfrute tanto–Dije riéndome.

Me tomé del cuello y me lanza a la pared, pero no me dolió solo me reí en su cara.

–Los días aquí serán un infierno para ti–Dice.

–Solo existe un jefe y ese soy yo–Dije y le di un golpe con mi pierna en su estómago.

Me soltó y lo tome del cuello, tomé la navaja que traía y corte lentamente su mejilla.

–Crees que te tengo miedo imbécil–Dice.

–Deberias no sabes de lo que soy capaz–Dije.

Saco fuerzas y me empujó fuertemente, y así fue como empezó una pelea que ya no podía parar, mis golpes aumentaban cada vez más al verlo, me recordaba a Leonardo.

Lo empuje fuertemente y termino en el piso, pero se levantó intento darme un golpe en el estómago pero lo esquive y le di una patada en su estómago, me descuido por un momento y me pega un puñetazo en la nariz haciéndome sangrar pero eso no me detiene.

–¡ALTO!–Dice un policía.

Ninguno de los dos nos pudimos detener hasta que dos policías se acercan y nos separan a ambos.

–¡Salgan todos de aquí!–Grita el policía.

–Te doy 5 segundos para que te vayas de aquí policía de quinta–Dice el Diablo.

–Lo siento mucho Diablo–Dice el policía.

–1–Dice contando con su dedo.

–Pero es que me mandó la agente para llevarte a la celda de castigo.

–2

–Solo vine a eso.

–3

–Diablo ven por favor.

–4

–Te defenderé lo prometo.

–5

Diablo toma al policía del cuello y lo lanza a la pared fuertemente, el policía corre rápidamente a la puerta.

–¡QUE ESTA PASANDO AQUÍ!–Dice un hombre entrando.

Era algo y blanco, traía puesto un uniforme con muchas medallas atrás de el venían 2 hombres con armas y su rostro reflejaba la frialdad.

–Tu debes ser el famoso Jefe de la Mafia y tú el diablo.

–Asi es yo soy el Diablo para servirle–Dice.

–No me gustan los tipos de falda–Le dice al Diablo.

Fue inevitable no reír por el comentario de este chico.

–Soy el Comandante Marco y estoy aquí para poner orden.

Marco parecía ser un hombre con poder no tanto como yo pero si porte lo demostraba.









Continuará....

Mil disculpas por no actualizar rápido pero está gripe no se va 🥺y me da bastante sueño, pero el día de hoy tenía muchas ganas de escribir de nuevo y espero que les guste este capítulo los tkm❤️

Casada con el Jefe de la Mafia Where stories live. Discover now