Por cada jodido latido

Y nada más.

Un pequeño es naturalmente bueno,
naturalmente malvado,
un todo o nada.

Se puede ser de muchas formas cuando no se te acribilla de gravedad.
La bondad es sencilla cuando desconoces
la sonrisa torcida de aquel
problema a la vuelta de la esquina.

Al crecer, parpadeando, sumido en la realidad de lo jodido que estás, y aún así, aventurándose a sacar a rastras
a alguien de su propia fosa.
Las cosas que haces por amor
y nada más.
No se trata de amabilidad.
No es empatía.
Dejen de mentirles a todos con esa vil propaganda surrealista.
Estamos perdidos, no hay salvadores.
Llegamos
con la propiedad de la soledad.
¿Por qué habría otra razón, diferente al amor, para ignorar tu propio dolor
y sentir aquel que no te pertenece
como si fuera tuyo?
¿Quizás porque brindar apoyo implica ganarte favor a tus propios ojos?
¿Te enalteces ante la sociedad?
¿O, simplemente, eres otra víctima del impulso desconocido que nos atrapará entre sus dedos hábiles a todos un día?

—Red 赤.