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Así se pasaron las horas,luego días,y finalmente semanas. Tres para ser más específicos.

Desde aquel momento en que Jisung salió del hospital,Minho se desapareció de su vida como se lo había pedido desde un principio,y este último ni siquiera lo buscó porque no tenía cara para verlo a los ojos sin sentirse culpable.

Tan pronto llegó Chan, él se ocupó de contarle todo lo que había pasado.

Y a todo,se refería con todo.

Le contó lo de su compromiso con Han,lo de su familia,lo que padecía en aquel entonces,sus arranques agresivos,su recuperación,la llegada de Han,sus insistencias e intentos,lo del accidente,y finalmente...Lo enamorado que aún seguía de su esposo.

¿Que si se lo tomó bien? Por supuesto que no,ese mismo día Chan le propinó un puñetazo en el ojo y en el labio inferior,y como Minho se sentía merecerlo no hizo nada,más que aguantar como el hombre que era más allá de lo literal.

Fue responsable de sus actos una vez más,el rubio no le hablaba y cortó todo tipo de contacto con él al igual que Jisung. Minho no podía sentirse más miserable,pues no hay nada peor que no estár al lado de él,fuera de eso lo demás ya nada importaba.

¿Esto es el karma? Sí,tal vez era eso.

Ahora nos encontramos en la actualidad,Minho paseaba tranquilamente con su pequeño amigo DoDo,un bello cachorrito Pastor Alemán que decidió adoptar la semana pasada.

- ¿Jugamos, amiguito? - Dijo y el cachorro ladrón en respuesta.

Minho aventó su pequeña pelota de goma lo suficientemente lejos para que la buscase y a la vez no lo perdiera de vista. Sonrió cuando su amiguito tan inteligente la tomó y venía corriendo para entregársela.

- ¿Otra vez? - El cachorro volvió a ladrar,pero esta vez Minho la tiró más lejos (aunque no tanto)

Y así estuvieron por treinta minutos,el pelidorado al menos en ese momento se sentía en paz y nada lo atormentaba, aunque aveces tuviera leves recuerdos de su mala pasada al menos DoDo lo entretenía lo suficiente.

- ¿Sabes,DoDo? Me alegra que por lo menos tú estes conmigo - Comenzó a decir, recostándose en la madera del arbol - Me sentía solo...Una vez más la cagué y en definitiva perdí al amor de mi vida,no soy de tener amigos,al menos JeongIn y Hyunjin me escuchan pero ellos también tienen una vida,van a tener un bebé también...Parece que mientras la gente es feliz,yo soy el único pendejo que sufre,pero me lo merezco,¿No,amigo? - El canino ladró - Tienes razón,no sé que habrás dicho pero debes estár de acuerdo en que soy un idiota.

- No somos perfectos,Minho...

- Lo sé DoDo,lo sé,pero mi Hannie me dijo que podíamos ser me...Espera,¿Acabas de hablar? - Preguntó viendo al cachorro,pero este solo ladró,¿Minho estaba alucinando? Se sacudió su cabeza y miró con el ceño fruncido al canino - Ahora me estoy volviendo loco...Por un momento creí que hablabas exactamente como mi Jisung,pero no, definitivamente estoy alucinando.

- Yo no creo eso.

- ¡Lo volviste a hacer! - Exclamó el mayor ahora sí escuchando perfectamente la voz de Jisung,pero ahora no estaba tan seguro si provenía de su perro - ¿DoDo... Estás embrujado?¿O-o soy yo el que se está volviendo loco?

- Loco siempre has estado,pero aún así...Te amo.

Mientras Minho seguía escuchando su voz,miraba por todos los alrededores como tratando de buscar a ese alguien en específico.

Hasta que volteó hacia su espalda y lo vió.

Ahí estaba él,parado sonriendo de la manera más linda y angelical posible, vestía una camisa manga corta color rosa crema,unos jeans azules y unas converse.

➶𝒫ℴ𝓇 𝒞ℴ𝓂𝓅𝓇ℴ𝓂𝒾𝓈ℴ➷Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon