Capítulo 23 "Frutos"

29 1 0
                                    

Cuando terminaron de armar su maqueta, los tres adolescentes pasaron el resto de la tarde en el jardín de la familia, al llegar la noche Laura pasó a recoger a su hija Zoe, aprovechando también en preguntar por la salud de su sobrina.

—¿Cómo está Grace? Collin me dijo que ya pasaron dos semanas de que inició su tratamiento.

—Es muy difícil para mi. —respondió la castaña. —Como madre no quiero que mis hijos sufran por nada, que mi niña hay sido diagnosticada con leucemia siendo tan joven me afectó sobremanera.

—Sé muy bien de lo que hablas, a mi tampoco me gustaría que Zoe enfermara o aún peor... pero hay algo que me preocupa. ¿Adam ya sabe lo que pasa con Grace?

—No. —contestó pronto. —Ella me pidió que no le dijera nada, aunque eso no signifique que estoy de acuerdo.

—Pero esto es algo que mi hermano tiene que saber. No pueden ocultarle algo así por mucho tiempo. Podría sentirse rechazado por parte de ambas.

—¿Crees que no lo sé? —respondió algo agitada. —Cada noche antes de dormir le doy vueltas a este asunto en mi cabeza, tratando de encontrar una manera de hablar con él sin lastimarlo, pero todas dan el mismo resultado.

—Collin me habló como médico, está dispuesto a respetar la voluntad de Grace, pero como tío y padre también le dolería si yo le oculto algo relacionado con Zoe, solo piénsalo. Es mejor que se entere por ti a que lo haga por cuenta propia.

Laura tenía toda la razón, algo que hizo reflexionar aún más a Megan.

Después de esa corta plática los tres adolescentes se despidieron, el hermano mayor de Selim pasó por él en cuanto le envió su ubicación, Laura y Zoe se quedaron un rato más para ponerse de acuerdo en una sorpresa que le querían hacer a Adam por su cumpleaños, aunque faltaban dos semanas. Sería algo pequeño, solo la familia, debido a que la situación de los Lümbitz aún era crítica.

Al caer la noche, Grace terminaba de retocar la maqueta en la que habían trabajado muy duro, en ese momento Adam venía saliendo de su despacho, después de un día de trabajo muy pesado aún estando en casa, había detalles que resolver con su cuñado.

—Buenas noches.

—Buenas noches. —contestó muy concentrada.

—Tu madre me dijo que tu prima y ese chico ya se fueron a casa. ¿Ya acabaste con tu maqueta?

—Aún no. Necesito que todo se vea simétrico. ¿Puedes darme tu opinión?

Se sorprendió por la pregunta de Grace, sin embargo no dudó de darle su muy sincera opinión.

—Bueno, si te pones de pie justo donde estoy, puedes notar una ligera curva en la parte superior derecha.

Al escucharlo, Grace se puso de pie e hizo justo lo que su padre le había dicho, comprobando que era verdad lo que le decía.

—Si quieres, puedo ayudarte con eso sin que tengas que desmontar toda la maqueta.

—¿Cómo sabes que es desmontable?

—Fácil, en cada unión puedo notar que hay un muy diminuto espacio entre ellas, recuerda que mi empresa es de construcción y diseño, sé reconocer un trabajo de este tipo.

—Si tú lo dices. No estaríamal que me ayudes, después de todo esto es lo tuyo.

Emocionado por la propuesta, fue a su despacho por unos materiales que todavía conservaba, al ver que se marchaba, Grace pensó que había sido una tonta por pedirle tal cosa, su irada cambió cuando vio que regresaba con una caja mediana con algo que no sabía que era.

Aunque duelaWhere stories live. Discover now