Capítulo 2: El trato

234 23 4
                                    

Megan

No pude dormir ni un poco.

Tuve pesadillas horribles y desperté sudando frío, algo me dice que este no será un buen día.

Me preparé al igual que todos los días y bajé a desayunar.

Mamá no quiso acompañarnos y papá estuvo serio todo el tiempo, esta noche hablaré con él.

- Logan necesito que vayas a la oficina hoy en la tarde a traer unos documentos que necesito para la junta del viernes.

- Cuenta conmigo papá.

- Y Megan, trata de no salir mucho ¿si?

- Lo que ordenes papi.

Una vez que todos se fueron a sus labores fui al jardín a terminar de retocar unas flores que planté esta semana.

Por alguna extraña razón se me ha dado muy bien esto del trabajo de jardín, pero la opresión en mi pecho no ha cesado.

Adam

Llegué puntual a la oficina de Hicks.

- Bienvenido Adam, ¿Le ofrezco algo de tomar?

- No se moleste Mason, prefiero ir directo al punto. Como sabrá no le puedo seguir esperando más tiempo, necesito que haga efectivo el pago de los préstamos que le he hecho.

- La procesadora no está como en sus mejores tiempos, le pido que me de cinco meses más o menos para...

- ¿Acaso no me escuchó? Le he dejado pasar mucho tiempo Mason, así no intente convencerme.

Miré alrededor de su oficina y una foto enmarcada me llamó la atención. Con la información que recibí en mi correo se perfectamente que debo hacer.

- ¿Ella es su hija?

- Si, mi pequeña Megan - con que ese es el nombre de la mujer de ayer.

- Le propongo un trato Mason... Estoy dispuesto a perdonarle la deuda en su totalidad, con una condición.

- Usted dirá.

- Quiero casarme con su hija Megan.

- Pe-Pero es... es mi niña... no... no puedo... hacerle eso.

- Tiene hasta mañana para pensarlo. Con permiso.

¿Habré hecho bien? Tengo entendido que aquí en San Francisco todos conocen a esa mujer como la loca del cementerio.

La verdad me importa muy poco, muy pronto ella estará a mi lado y me voy a encargar de hacerla sentir tan miserable como me sea posible.

Su familia, en cierta manera, me hizo daño y quien mejor que ella para vengarme.

Megan

Estaba terminando de decorar unas galletas de avena para papá cuando Logan llega a la cocina.

- Papá acaba de llegar y necesita hablar de algo muy importante contigo.

- En un momento voy.

Me quité el mandil y fui donde mi amado padre.

- ¿Querías verme papá? - dije entrando al pequeño despacho que hay en casa.

- Si hija... - su rostro muestra total preocupación - Hay problemas con la procesadora, tenemos una gran deuda con nuestro principal proveedor y nos está exigiendo pagarle.

No se muy bien de quien se trata pero si estoy al tanto de que nos ha salvado en muchas ocasiones.

- ¿De cuánto es la deuda papá?

Aunque duelaWhere stories live. Discover now