Enamorando a Sam

CAPÍTULO 28

Chris

El frío invierno se acerca y con él llega la tan esperada Navidad. Las calles comienzan a estar heladas y ello, nos obliga a ir tan abrigados que podríamos rebotar en el suelo. Detesto llevar tantas capas de ropa encima, impiden que me mueva con normalidad, y resulta incómodo. Pero antes de que comiencen las vacaciones, vienen unos días bastante oscuros en el instituto, ya sabéis, semanas llenas de trabajos, presentaciones, exámenes, etc. Y teniendo en cuenta que estamos en último curso, es importante ir cumpliendo con todo si quiero tener buena nota. Mi única vía de obtener una beca para la universidad, es obteniendo una media brillante y quedar entre los tres alumnos con mejores notas. No creo que suponga un gran reto, todos los años acabo en segundo o tercer lugar, pero, aun así, me gustaría terminar siendo el primero. Esta semana, llega por fin el gran día en el que Sam y yo tenemos que presentar el trabajo de ciencias sobre las mariposas. Tengo que decir que nunca me había puesto tan nervioso para presentar un trabajo y en esta ocasión lo estoy especialmente.

Sam insistía en que podía explicar gran parte de la información, pero sé que la señora Miller pensará que me estoy aprovechando de ella, así es que la he convencido de que lo hagamos a partes iguales. La presentación quedó bastante bien y el trabajo en sí es completo, sobre todo teniendo la enciclopedia completa de las mariposas como compañera. Pero la parte más difícil es explicar todo lo que hemos redactado de forma llamativa y sin apuntes, es decir, de memoria. Actualmente sigo aprendiéndome mi parte, lo que normalmente no me supone demasiado, pero he de admitir que hay demasiados tecnicismos que memorizar y me está costando más de lo que me temía, ojalá pudiera tener el mismo entusiasmo que Sam.

Me encuentro apoyado sobre mi taquilla, con los apuntes en mano, memorizando todas y cada una de las palabras que se encuentran talladas sobre el papel. Las manos me tiemblan y el corazón hace su trabajo con más esfuerzo que nunca. Lo he repasado cientos de veces desde ayer por la tarde, pero siento que no todo lo tengo en mi cabeza.

— ¿Aún estás con eso? Yo ya memoricé mi parte hace días —interviene David quien se acerca con los demás.

— La verdad es que esto se me está haciendo más pesado de lo que me imaginaba y no me ayudas restregándome que te lo sabes —me doy la vuelta sobre mí mismo y comienzo a darme golpes en la cabeza contra mi taquilla.

— Si haces eso, vas a terminar por olvidar lo que ya sabes —se burla Chad mientras Tyler se hace con los papeles.

— No es tanto, quizás no te estas concentrando en esto.

— Todos sabemos en donde tiene la cabeza en todo momento, es lo que tiene —vuelve a hablar el sabio de David.

— Acepto consejos —le ruego a Tyler.

— Prueba a no memorizarlo técnicamente. ¿No has aprendido nada de Sam? De ella habla su sabiduría, no lo que pone en el libro. Simplemente quédate con lo importante y explícalo como lo has entendido.