Harry Potter : Nuevo Mundo [2]

Capítulo 217

La puerta del ala de mujeres se abrió de nuevo, revelando a Lavender con un vestido largo beige con patrones ligeramente más oscuros. El vestido parecía ligero a pesar de que le llegaba casi hasta el suelo y estaba cerrado casi por completo, dejando solo los brazos y el cuello lo suficientemente abiertos para llevar un collar pulcro. Es difícil expresarlo con palabras, pero combinado con el peinado largo y sin complicaciones de cabello dorado ligeramente rizado, creó un aspecto sorprendentemente agradable y hermoso. Pues sí, y unos guantes a juego con el vestido por encima del codo. Lavender bajó absolutamente feliz, sonriendo amplia y felizmente al desconcertado Seamus. Supongo que si fueran al baile solo como amigos, es muy posible que al menos uno de ellos reconsiderara su actitud.

Justo cuando Seamus recobró el sentido y se acercó a Lavender, quien casi había bajado las escaleras, ofreciéndole la mano, otra chica ciertamente hermosa apareció en la puerta del ala de mujeres. De las opciones ofrecidas y desconocidas para mí, Hermione eligió un vestido tan negro como mi disfraz, casi completamente sordo pero sin mangas, con un corsé perfectamente ajustado y una falda larga hasta el suelo no particularmente pero aún esponjosa. Raros destellos de luz a lo largo de los patrones del ramillete le dieron volumen a la tela completamente negra, delineando ligeramente la figura de la niña. El cabello perpetuamente rebelde caía en mechones pulcros y rizados sobre su hombro derecho, mientras que en el izquierdo estaba recogido y tirado hacia atrás con un pasador plano de plata. Su maquillaje ligero, los accesorios plateados raros y discretos no atrajeron la atención, pero le dieron a su imagen una sensación de plenitud y plenitud. Una capa ligera sobre los hombros y guantes negros sobre el codo completaban la imagen.

Saliendo de la penumbra del rincón anodino de la sala común, subí las escaleras y le di una mano a la chica.

"Te ves hermosa", me giré hacia Hermione con una leve sonrisa tan pronto como su mano estuvo en la mía. "Tenga la seguridad de que esta imagen permanecerá para siempre en mi corazón".

Una sonrisa ligera y ligeramente depredadora visitó el rostro de la niña. No estaba avergonzada ni ardiendo de entusiasmo, sosteniéndose como si la pelota fuera cosa de todos los días. Su postura, sus movimientos, sus gestos, nada delataba ninguna emoción innecesaria excepto sus ojos. Estaban llenos de entusiasmo, y mis palabras se reflejaron claramente en ellos.

"Gracias, Max".

En ese momento, Dean Thomas optó por salir corriendo del ala masculina con estrépito. En un frac, todo es como debe ser.

"¡Cambié de opinión!" anunció en voz alta a todos aquellos dispuestos y no dispuestos a saber las razones de tal alboroto. "¡Ya voy!"

Con esas palabras, y ante la risa de los demás en la sala común, Dean salió volando de la sala común como una bala. Una vez más revisé el espacio con varios hechizos a través de la varita en mi bastón. Esto resultó ser algo muy conveniente si sabes cómo conjurar sin gestos ni palabras; por supuesto, nadie sospecharía si el hechizo no tiene efectos visuales ni de otro tipo.

"Creo", dijo Lavender con una sonrisa feliz. Todos deberíamos darnos prisa. El baile empieza en diez minutos.

Así que los cuatro salimos de la sala común de Gryffindor y revisé el espacio a mi alrededor una y otra vez y no encontré a nadie. Estuve haciendo esto todo el camino hasta el Gran Comedor, y justo antes del último giro, reduje la velocidad de nuestra compañía.

"¿Has olvidado que necesitamos averiguar la identidad del villano?" Les dije a los muchachos que estaban perplejos por la repentina parada.

"Um..." Seamus pensativo pasó su mano por su cabello, inmediatamente desordenando su peinado. Su cabello es generalmente único: a medida que lo mueves, permanece así. Lavender inmediatamente alisó algunos mechones de la cabeza de su pareja. "Parece que lo olvidamos".

"Entiendo que quieras hacer un chapoteo bajando las escaleras, pero propongo hacerlo un poco diferente. Ocultamos a las damas bajo la desilusión y fingimos venir solos. Para no separarnos de las niñas, mantenemos nuestro mano así..." Doblé mi brazo izquierdo a la altura del codo y como para sostener la solapa de mi chaqueta en el mismo botón.

"¿Como esto?" Seamus repitió el gesto, y Lavender se dio cuenta de inmediato y puso su mano en el codo del tipo: solo había un lugar para ella. Hermione repitió después de la rubia.

"Exactamente. De esa manera, nos aseguraremos de que las chicas estén con nosotros. ¿Y?"

"No sé encantamientos," dijeron Seamus y Lavender casi simultáneamente.

"Lo hacemos. Entonces, buscamos y recordamos las caras de regodeo al vernos. ¿Listo?"

Todos asintieron y yo, reduciendo mi bastón al tamaño de la varita, rápidamente puse un hechizo de ocultación sobre Lavender y Hermione.

"Los amuletos son removibles por cualquier brujería. Puedes hacerlo sin varita. Lumos, por ejemplo."

"Ya veo", escuché la voz de Lavender desde el vacío, y Hermione ya lo sabía.

"Vamos a salir", devolví el bastón a su tamaño original.