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-- ¡¿Qué hiciste?!

--Perdón, perdón, perdón, me he olvidado del condón.

Guillermo quiso separarse pero un dolor inmenso lo regresó al regazo de Lionel.

-- Aunque ha sido culpa tuya también. Yo no venía con estas intenciones.

El omega le miró furioso. No estaba para ser regañado.

-- ¿Cuánto tiempo tarda en bajar esto?

-- ¿No tuviste clases de sexualidad en la escuela o qué?

Un golpe en su hombro hizo que se dejará de esa actitud.

-- Ya, ya. Dura unas cuantas horas.

-- ¡¿Horas?! ¿Cómo es que vamos a dormir?

Qué desespero, de haber sabido, Guillermo se hubiera quedado virgen toda la vida.

-- ¿Qué me decís? Apenas son las seis de la tarde.

-- Pero no vamos a poder comer pegados así, entonces es mejor dormir ya para no tener hambre.

Uy, ahora que recordaba, tenía la cena con Lewandowski.

-- Podemos dormir de cucharita.

Propuso Lionel. Guillermo enrojecio de nuevo y el alfa le pareció gracioso que en esta situación, con su miembro dentro, el omega siguiera sonrojandose.

Andrés no espero tu respuesta y tomándolo por debajo de las rodillas obligó a doblar sus piernas. Que buena vista tenía, con su verga bien enterrada y una mezcla de su semen y el lubricante de Guillermo saliendo a gotas de su entrada. Con fuerza lo alzó y acomodó de frente, un gemido de incomodidad salió del mayor y para compensarlo beso con parsimonia su espalda y hombros.

-- Está bien, si querés dormir eso haremos, bebé.

El primer mote cariñoso y Guillermo sentía que subía a las nubes.

-- E-espera. Antes tengo que hacer algo...

-- ¿Qué es?

Preguntó curioso Messi.

Guillermo se mordió el dedo, no queriendo comentarle de la cita que había acordado con el polaco.

-- Y-yo si iba a salir hoy, pero no con Manuel. Lewandowski está en la ciudad y nos habíamos quedado de ver hoy para cenar.

Hubo silencio. Agradecía estar de espaldas al alfa, no queriendo ver su cara de celos.

-- ¿Y vamos a salir a cenar los tres o cuál es el asunto?

-- N-no, pero no quiero dejarlo plantado. Voy a mandarle un mensaje.

Ochoa alcanzó sobre el buró su celular y comenzó a escribir a Robert.

-- Que seco es ese pibe, seguro te joderia sólo de misionero. Que bueno que no lo aceptaste.

-- Deja de leer la conversación, dame espacio.

Lionel rodó los ojos y sonrió. Su orgullo estaba enaltecido.













Unas horas más adelante, Guillermo por fin cayó exhausto. El nudo ya se había deshinchado y Lionel logró sacar su miembro. El trasero del omega era un desastre, todos los fluidos escapaban a chorros de su entrada y comenzaba a manchar las sábanas. El menor se levantó sin hacer mucho ruido y salió para el baño, regresando a los pocos minutos con una toalla mojada en agua caliente. Con delicadeza limpio el cuerpo entero del omega y repartió más besos, insasiable de la tersa piel. Aprovecho a darse también un baño, usando solo unos bóxer de Guillermo y una de sus infinitas playeras del club América. Se miró al espejo y notó lo grande que le quedaba, que vergüenza. Aún así por fin a las diez de la noche, el argentino se acostó, abrazando al mexicano y acurrucandose como aquella primera vez en Qatar.

unexpected - Messi x OchoaWhere stories live. Discover now