El Boss [UR 01]

Capítulo 34: Peligro.

Viktoria Románova

Estaba durmiendo junto a Gregory tranquila y de repente me levanté y eran las tres de la mañana y necesitaba, mi cuerpo exigía con violencia torta de chocolate, mi estómago rugía con furia. Baje las escaleras y entre en la cocina buscando como loca torta y no había, «¡¿Cómo no va a ver torta??!», corri a la habitación y desperté a Gregory.

— Gre amor despierta — lo sacudí y se quejo. — quiero torta y ahora.

Le exigí pero el estaba plácidamente durmiendo, no se levantaba y me dió rabia tanto así que fui al baño y agarré un vaso con agua.

— Gregory Kuznetsov si no te levantas ahora mismo te mojare — lo amenace e hizo caso omiso. —, tu te lo buscaste.

Le eche el agua y se levantó gritando como un loco.

— ¿Estás loca? — me gritó alterado.

— Si lo estoy — respondí mirando su espalda.

— Son las tres de la mañana amor — se volvió a quejar y quitó las sábanas mojadas de la cama.

— ¿No me vas a preguntar por qué te levante? — cuestioné brava.

— ¿Por qué lo hicistes? — preguntó sentado en el colchón sin sábanas.

— Quiero torta Gre — me acerque a él —, desde hace rato te estoy levantando para que me compres torta de chocolate.

—¿Aquí no hay? — pregunto y negué.

— No hay nada que me apetezca y los cocineros no están, ni siquiera hay materiales para hacerla — susurré — los trillizos y yo queremos torta de chocolate.

— Abrígate iremos a la casa de Igor para ver si tiene — dijo y salte de alegría.— Viktoria no saltes, recuerda el embarazo.

Deje de saltar y cogí un abrigo, lo bueno es que Igor vive en nuestro mismo terreno y es muy fácil llegar caminando hasta su casa ya que no hay necesidad de usar un transporte. Tocamos la puerta y no salían, a Gre le tocó llamar por teléfono y fue cuando nos abrieron.

— ¿Qué les pasó que vienen a esa hora? — preguntó Igor preocupado.

— ¿Tienes torta de chocolate o ingredientes para hacerla? — preguntó Gre ignorando lo que dijo.

— Lexa está en dieta y Viktor es alérgico al chocolate, así que no tengo absolutamente nada de eso — al escuchar eso me fui en un mar de llanto —, pero tengo tarta de durazno.

Negué y Gre le explicó que iríamos a la casa de Alek y nos dejó ir, por lo menos Alek me dió un batido de chocolate pero eso no fui suficiente quería más y llegamos a nuestras última opción.

—¿Qué sucede? — preguntó Iván, estaba bien despierto.

— ¿Tienen torta de chocolate? — preguntó Gre.

— No me digas que no tienes — casi llore.

— En realidad estamos comiendo torta — el hizo una pausa tortuosa — de chocolate. — pase a su cocina y Nicolette estaba comiendo.