«¿Esa es mi expresión?» (+18)

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Tanjiro se encuentra corriendo con mucha prisa.

—¡No puede ser, no puede ser! ¿Él es un demonio? ¿Pero porqué? ¿Cómo ocurrió eso? Es imposible, no no...

A cada paso que da todas las ideas que tenía en su cabeza se iban mezclando con desespero y ahora entendía porque confundieron todo, pero por más que sepa eso aún no lograba entender como pasó. Está asustado, más aún porque podía sentir como alguien lo seguía por detrás.

—¡No voltees no voltees! ¡No mires atrás!

En definitiva fue un gran error haber ido a la finca sin nadie que lo sepa, ni siquiera estaba con Nezuko a su lado.

Su cuerpo tiembla a cada paso que da, todo está oscuro y hay varios obstáculos en el camino. La luna no había salido esa noche por lo que utilizaba su vista al máximo tratando de ver por dónde va. Sus pasos suenan con fuerza cada vez que toca el suelo y agita su cabeza en busca de ideas, sus ojos están con una mirada aterrada, necesita ir más rápido.

—Avanza avanza.

Era muy tarde.

Alguien ya se encontraba detrás suyo con una distancia muy cercana, podía escuchar la risa que este soltaba.

—No corras, es por las puras chico...

Tanjiro trató de no hacer caso aquella voz y desesperado dió un gran salto para tratar de evadirlo. Sólo tenía que irse por en medio de los arbustos, pero cuándo lo hizo y estuvo a lo alto sintió algo incrustarse fuertemente en su cuello ocasionando que suelte un leve quejido. Sus ojos se cerraron ante el dolor y sin poder sostenerse cayo bruscamente al suelo golpeándose todo el cuerpo y ocasionándose graves heridas.

«No te duermas, no lo hagas...»

—No dejaré que arruines nada... —Pronuncia el pilar acercándose a él con una sonrisa mientras se relame los labios —¿Porqué tenías que meterte en primer lugar?

—Eso es lo que me pregunto yo, por eso te dije que no estés a su lado pero tú ni siquiera me hiciste caso Muichirou...

—Tch... De todas formas lo olvidará así que sólo ignóralo —Rueda los ojos tomando su katana.

—Demonio...

Ambos abren los ojos al escuchar al Kamado hablar aún con la poca fuerza que tenía.

—Él es un demonio... Avísalo —No entienden a quién se lo dice y creen que habla sólo, pero al instante un cuervo sale de la oscuridad dirigiéndose hacia la casa del patrón gritando:

—¡Demonio demonio! ¡Él es un demonio!

—¡Maldita ave! ¡Debemos matarlo! —Habla Yuichirou con molestia y Muichirou va tras él en busca de encontrar al cuervo y acabar con él, saben que sólo una palabra arruinaría todo lo que habían logrado hasta ahora. No pueden quedarse sin hacer nada.

Tanjiro cae inconsciente sin poder evitarlo y ruega con todo su ser poder despertar con vida después, sin ser asesinado o devorado.

(...)

—Kamado-Kun, despierta, Kamado-Kun...

—¡Mhh mhh!

Voces se escuchan a su alrededor y el peli burdeos abre sus ojos lentamente, puede sentir el fuerte dolor en su cabeza.

—Tanjiro ¿Estás bien?

Voltea su vista con dificultad para saber quién le hablaba y logra ver como Shinobu, Nezuko y Muichirou estaban en espera de que despertara.

—No hagas esfuerzo en levantarte por favor, tu cuerpo está recuperándose aún por la fuerte caída que tuviste —informa Shinobu.

—¿Caída? —trata de recordar— No puedo recordar lo que pasó, que extraño —Se dice así mismo.