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Ela- Antonio, Antonio ayúdame, por favor, soy Ela, ayúdame- dijo desesperada por la otra línea, se escuchó como Antonio se levantaba de su cama y se cambiaba.

Antonio- Ela ¿En donde estas?.

Luca- Necesitamos que venga la policía a...- Luca dio la dirección bajaba a Ela al borde de la vereda unas casas más adelante.

Antonio- Bien, la policía va en camino, ya llame al equipo Ela, oíste volverás a casa.

Luca estaba atento por si su tío salía de casa y también estaba atento a Ela.

Luca- ¿A quién llamaste? No sonaba como la policía.

Ela- Yo llame a la policía, solo que le dará mucha más importancia al asunto que muchos otros, su hermana trabaja con mi tío y la quiero como si fuera parte de mi familia, y me quieren mucho, al menos eso creo- se apoyo en el hombro del chico y comenzó a cerrar sus ojos.

Luca- Hey, hey, Ela ¿Así te llamas verdad? Lo oi de la llamada, no  te duermas cuéntame más de tu vida por favor- sostuvo la cabeza de la chica entre sus manos.

Ela- Si, es mi nombre, pero déjame dormir, da igual lo que pase, no tengo más que vivir- dijo bostezando para luego cerrar los ojos.

Luca- Ela, Ela, no,no,no,no,no, por favor despierta, luchaste mucho para llegar aquí, por favor- lagrimas salían de sus ojos y se deslizaban a través de sus mejillas, sirenas se escuchaban a lo lejos y la puerta de la casa de Luca se abrió, el joven miraba desde la vereda del frente con furia, no sabía porqué pero en tan poco tiempo se había encariñado con la chica, ella tenía una personalidad bastante peculiar.

Las patrullas pararon justo al frente de la casa de Luca, el hombre empezó a huir y los oficiales de policía lo siguieron hasta que uno se le tiro encima y luego lo esposo para llevárselo a la comisaria, Luca seguía intentando hacer que Ela despertara pero ni tuvo éxito, lo único que sabía era que respiraba pero nada más.

Antonio- ¡Hey! Suéltala o estarás en peores problemas de los que estás ¿¡Me oíste maldito?!- El detective se acercaba con su arma en alto seguido de otros detective de su misma unidad.

Luca- Esperen, escuchen por favor, soy inocente y ella necesita un médico ayudenla- cargo a Ela en sus brazos y miró a los detectives con una mirada desafiante como si no le importara una bala en su cuerpo, y era cierto ya ni el sabía que pensar ya no le importaba una bala en su pecho con tan solo dejar de pensar podría hacer cualquier cosa, de hecho en ese mismo momento no le importaba su tío solo quería acompañar a la chica a la que había ayudado a escapar de su propia casa, aún no se lo creía. Como era de esperar no lo dejaron ir con ella en la ambulancia ya que nisiquiera había preguntado, un oficial se le acercó para tomar su declaración, ¿Qué debía decir? Bueno tampoco que debía de mentir pero era todo muy confuso.

Oficial- ¿Como fue que ocurrieron los hechos de esta noche chico?.

Ela Casey- Chicago FireWhere stories live. Discover now