-𝐓𝐄𝐍𝐓𝐀𝐍𝐃𝐎𝐌𝐄

eighteen

— Cariño. — la voz dulce de Susie sonó desde el otro lado de la puerta

Salí del baño.

— Sucede algo Susie. — le pregunté.

— Te trague algunos vestidos para la cena de hoy en la noche. — me sonrió.

Definitivamente Susie era como una madre para mi.

— Gracias Susie, muchas gracias. — la abrace, esta no dudo en corresponderlo.

— Mi pequeña, te noto algo triste. — esta se alejó de mi para mirarme.

— Susie ayer por la noche. — suspire. — escuche que Pierre no me amaba y no fue por otras personas si piensas eso, fue por su propia boca.

Esta me miro algo sorprendida, ella no pensaba como papá ella si creía que él me amaba.

Igual que yo.

— Cariño. — al escuchar su voz me recordó tanto a mi madre, las ganas de llorar no se contuvieron.

Esta tan triste, lo había perdido al amor de mi vida.

Sus brazos me brindaron un acogedor abrazo.

Flashbacks llegaron a mi mente.

— Mami yo quiero las galletitas dale a papá solo la leche. — le pedía a mi madre la cual se encontraba dejando las galletas y la leche en la sala.

— Mi pequeña, tienes que compartir con papá. — esta me sonrió.

Porque tan solo te fuiste madre.

Amaba a Susie como mi madre pero sabía que esta no lo era, sabía que nadie ocuparía aquel lugar en mi vida que ocupo Lily Wolff.

Mi madre.

Flashback;

— Papá, mamá estará bien verdad. — le preguntaba a mi padre con la esperanza que dijera que aquel accidente automovilístico no habría pasado a mayores.

No obtuve respuestas.

— familiares de la señora Lily Wolff. — un hombre vestido de blanco salió de aquella sala donde se encontraba mi madre.

Papá se fue a una sona más alejada de aquella sala con aquel señor.

Pude ver como lágrimas salían de los ojos de papá.

Entendí que no ocurría nada bueno.

Pasaron días en los que no fui aquel hospital junto a mamá.

Días en los que no jugaba ni comía, quería a mi mami en casa.

— Lucie, tienes que comer. — me hablo papa.

— No quiero! — le grite.

— Lucie Wolff.

— No hasta que mamá esté aquí. — lo mire.

— Tienes 8 años debes de saber que si no comes podrías llegar a ir a un hospital.

— por lo menos hay estaré junto a mamá. — le dije.

Pasaron semanas en las que no veía a mamá.

Hazte que aquel día papá me había llevado al hospital.