Capítulo 6

260 8 57
                                    

Emma Hernández

-¡Eh! ¡Eso es trampa!- grita Ferran a lo que todos reímos.

-No es nuestra culpa que seas tan malo jugando al uno chaval- ríe Ansu- anda chupate 10-.

-Poenso vengarme que lo sepais- nos amenaza con los ojos entrecerrados.

Estamos Ansu, Pablo, Ferran, Eric y yo en la casa de Pedri. En estas semanas he estado quedando con ellos y se siente tan bien.

Me he hecho amiga de más integrantes de equipo, por ejemplo, Eric, Balde (que no ha podido venir porque tiene resaca de ayer), Jordi Alba (que al parecer también tiene resaca) y Lewandowski, aunque con el hablo en inglés para que me entienda mejor.

Pero con los que mejor me llevo son el trio calavera como yo les llamo, osea a ser, Pedri, Ferran y Pablo.

Ellos desde el primer día de acercaron a mí para hablarme y les tengo demasiada confianza, aunque con los demás también pero ellos son especiales.

Cuando terminamos de jugar decidimos pedir algo para cenar.

-Vale, ¿A favor de pedir sushi?- pregunta el canario con el móvil en la mano.

Yo levanto la mano siendo así la única que quiere.

-No me puedo creer que no queráis sushi- les digo mientras entrecierro los ojos.

-¿A favor de pedir pizza?- dice Pedri entre risas.

Todos levantan la mano y yo me hago la ofendida mientras ellos no paran de reir y reir.

-Bueeeeno, está bien- cedo al final con una sonrisa.

Pedimos la pizza y en cuanto llega nos sentamos todos en el sofá para cenar.

Yo me siento en una esquinita con Gavi a mí izquierda.

-¿Me puedes pasar un trozo de la de 4 quesos porfasss?- digo a lo que él me sonríe.

-Claro- coge un trozo ni muy grande ni muy pequeño- toma cosita-.

Vale, mi estómago ahora mismo está un poco alterado por lo que me acaba de llamar.

-De nada tigre- le digo sin pensar.

-¿Tigre?- me sonríe.

-Si tigre- contesto.

-¿Que quiere decir eso?- pregunta entre extrañado y divertido.

-Que pareces inofensivo y tranquilo pero en cuanto algo te molesta o estás intranquilo, sacas las garras- suelto una risa.

-De acuerdo preciosa- me mira con una sonrisa burlona- ese será mi apodo para ti-.

Me muero.

-¿Preciosa? ¿Porque?- que pregunta más tonta Emma por favor.

-Porque lo eres- dice y se queda tan ancho.

Las mariposas de mi estómago vuelven a revolotear por todo.

Hace unas semanas Gavi y yo empezamos con los coqueteos de bromas, y yo ya no me lo estoy tomando tan a broma.

Siento algo raro cuando él me mira y me sonríe, al igual que cuando me abraza, y me jode el no saber qué es.

-Gracias- miro hacia abajo con una mini sonrisa.

Acabamos de cenar y lo recogemos todo. Voy a la cocina para poner los platos y los cubiertos en el lavavajillas cuando los escucho a todos detrás mío.

No les tomo importancia hasta que noto como unas cuantas manos me cogen por detrás y me levantan haciendo que yo suelte un grito agudo.

-Qu... ¡No, no! ¡Bajadme!- grito intentando soltarme entre risas.

SEMPITERNO; Pablo GaviWhere stories live. Discover now