CAPÍTULO 16🤍

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La semana del cumpleaños de Clara había comenzado, eso quería decir que la escucharíamos gritar y dar ordenes a cada nada.

Y parece que el primer afortunado en recibir una orden suya seria Ryan.

—Tu encárgate de subir esas cosas a la cajuela del coche

El pobre se giró a mirarme en busca de ayuda, pero yo estaba tan ocupada terminando de desayunar mi cereal que fingí no notar que me miraba.

Al final se rindió y termino obedeciendo a las ordenes de su novia.

Clara iba de un lado a otro dejando mas bolsas de compras en la sala para que Ryan fuera subiéndolas al coche. Estaba por darle una cucharada en mi desayuno cuando dejo una caja frente a mí.

—Ally ayúdame a llevar estas. — lo dijo mientras miraba con una ceja alzada a Ryan que se había tumbado en el sofá.

—¿No crees que es muy temprano para comenzar con esto? —pregunte mientras me ponía de pie y dejaba mi plato en el fregadero.

—No, no lo es —se acerco a su novio y jalo de su brazo para que se pusiera de pie — Ryan ayúdame.

El susodicho se soltó de su agarre y llevo sus brazos detrás de su cabeza mientras la veía con una sonrisa en el rostro.

—Puedo hacerlo, pero se te esta olvidando una palabra cariñito —lanzo un beso en su dirección.

—Ahora Ryan —Mi amiga se cruzo de brazos, esperando como si esa demandante orden hiciera que Ryan se pondría de pie de nuevo.

Su novio negó con la cabeza.

—Si no la dices te quedaras sin regalo Bennet—jalo del brazo de mi amiga hasta dejarla sentada sobre sus piernas.

Clara rodo los ojos y entre sus manos tomo el rostro de Ryan

—Por favor — después planto un beso en sus labios y se puso de pie, y como arte de magia Ryan siguió llevando las cosas al coche.

Termine de limpiar el desorden que había dejado en la cocina, tome la caja y cuando salí del departamento, Ryan y Clara ya estaban esperándome dentro del coche.

Era su semana de cumpleaños, pero quería iniciar con los adornos y limpiar el bar en donde se festejaría, fue una sorpresa para todos que convenciera a Karl de que no lo abriera, bueno en realidad le convención que le pagaría para que el lugar estuviera cerrado toda la semana.

Mientras llegábamos respondí todos los mensajes que tenia de mi madre y volví a revisar algo en lo que llevaba pensando desde días atrás.

Era un plan importante que tenía tiempo queriendo hacerlo, pero primero necesitaba ver que tan bien me encontraba económicamente para llevarlo a cabo.

Cuando Ryan detuvo el coche en el estacionamiento, baje junto con la caja y me acerque a la entrada, lo primero que escuche cuando llegue fueron las escandalosas risas de Riley, y la razón de esa carcajada era nada más y nada menos que Aaron.

Era la primera vez que lo veía después de aquel día en el que los demás habían dicho que no sabían nada de él, nunca supe muy bien la razón de su desaparición y tampoco de la tristeza que tenia en ese tiempo Riley pero al parecer ya estaba solucionado.

Por otro lado se encontraba Logan que estaba recargado en la barra mirando a sus amigos, tal vez se le había terminado su sentido del humor por que no tenía ni un ápice de sonrisa en el rostro.

Deje la caja aun lado suyo, el ruido lo hizo voltear a verme.

Le sonreí como saludo, la verdad no estaba de humor para tener una discusión sin razón con el.

Todavía Te QuieroWhere stories live. Discover now