Todavía Te Quiero

CAPÍTULO 23🤍

Cuando los chicos se marcharon Clara y yo pasamos la tarde haciendo compras para la alacena de nuestro departamento, hasta que Ryan llamo a Clara para avisarle que nos esperaban en su departamento en media hora, según las palabras de mi amiga la junta había ido bien y que tal vez nos dirían la noticia de si hay o no contrato.

Después de dejar nuestras compras en casa, aproveche que aun faltaba tiempo para ir con ellos así que me di una ducha rápida y como esperaba que la noticia fuera buena decidí arreglarme un poco para celebrar.

Me puse un vestido blanco con estampado de cerezas por todos lados, mi cabello lo llevaba lacio y suelto, pero como no quería que se viera tan simple, me puse una diadema blanca.

Sali corriendo de mi habitación ante la insistencia de Clara por querer marcharse rápido.

Ya íbamos en camino cuando decidimos detenernos en un supermercado para comprar alguna botella, la cual nos podría servir de cual sea la noticia, si era una bueno la utilizaríamos para celebrar, pero si era un no la usaríamos para emborracharnos y deprimirnos.

-No es mi banda, pero juro que si la noticia es lo que creo que es, me orinare en los pantalones - dijo Clara estacionando el coche frente al edificio. - Lo cual seria vergonzoso porque jamás me e orinado con ropa encima.

Mi risa la hace girar a vere con una ceja arqueada.

-Cuéntame cual fue el chiste. - ambas salimos del auto y caminamos. Cuando entramos el recepcionista saluda a Clara con una sonrisa. Al inicio me parece extraño, pero recuerdo que Clara pasa casi todas las tardes aquí.

-Lamento decirte que si te has orinado encima - presiono el botón del ascensor. Clara suelta un sonido de indignación cuando el ascensor abre sus puertas. -Fue ya hace tiempo habíamos ido de fiesta y llegamos mucho después de la hora que tus padres te habían puesto, cerraron la puerta dejándonos afuera y como estabas tan ebria ni siquiera debiste sentir tu orina deslizarse por tus piernas.

-Si yo no lo recuerdo no paso - se encoje de hombros. Trato de no burlarme del hecho de que sus mejillas se sonrojaran.

-Por supuesto amiga, tu jamás te orinarías encima.

El ascensor se detiene en nuestro destino, cuando mi amiga pasa por un lado mío noto que aun tiene la cara completamente roja. ¿Cómo se avergüenza por algo así y no porque me la encontré con la cara de su novio metida entre sus piernas?

La alcanzo y paso uno de mis brazos por sus hombros. Recargo mi cabeza en la suya, aunque yo tenga una estatura de 1.65, ella es incluso un poco mas baja que yo.

-Descuida, ya ni siquiera lo recuerdo.

Rueda los ojos haciéndome reír.

Tal vez mi risa fue demasiado escandalosa como para ocasionar que Aaron saliera abrir sin siquiera haber tocado.

-¡Las dos faltantes llegaron! - nos anuncia emocionado. - Tomen bellas mujeres la fiesta esta por comenzar.

Nos entrega una cerveza a cada una y con su mano en la espalda baja de ambas nos incita a caminar.

-No hay ninguna fiesta - dice Riley saliendo de una de las habitaciones. Va vestida con un vestido negro con la falda un poco esponjada y unas botas negras hasta la rodilla, ahora decidió que el look de su cabello seria color celeste, larga hasta la cintura y con fleco. - ¿Qué tal me veo?

Da una vuelta para que Clara y yo podamos apreciarla.

-Tu cabello me recuerda al algodón de azúcar. - menciona Aaron antes de darle un trago a su cerveza.

Riley rueda los ojos dándonos a entender que no soportaba a Aaron, pero su amplia sonrisa nos dice otra cosa.

-Te vez preciosa Riley - le digo.