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Taehyun cerro la puerta de su habitación suspirando, su mamá había tomado una decisión, él iba aceptarla, porque estaba cansando.

Aunque no lo dijera en voz alta, ella lo notaba y eso era suficiente.
Tal vez se apresuró demasiado, estaba corriendo en un laberinto para el cual sus pies aún no estaban listos, así que iba a dejar de correr.

Entró al baño de su cuarto para lavar su rostro y sus dientes, aplicó las cremas que Beomgyu le había comprado hace ya bastante tiempo.

Tiempo, esa palabra resonó en su mente, ahora tendría mucho más tiempo de estudiar para el examen que venía en menos de 3 semanas.

Taehyun desde que recuerda soño con entrar  a la Facultad de arquitectura en la Universidad de Seúl. Cuando recién piso esa casa le fascinó la composición, pensó que las casas en el barrio al que se mudaron eran muy diferente a donde sus abuelos vivían, todas eran iguales por fuera, así que la verdadera sorpresa estaba una vez entrabas a la casa. Le parecía una locura pero al mismo tiempo divertido, como una caja sorpresa.

No fue hasta que comenzó a dibujar los edificios que veía a través de su ventana o en la escuela que se decidió por estudiar arquitectura, a demás un factor que lo impulsaba y lo motivaba aún más es que su abuelo era arquitecto, por eso la casa de ellos era tan especial pues él mismo se encargo de diseñarla. 

Su mamá lo apoyo cuando expresó su deseo de entrar a la Universidad de Seúl prometiéndole que haría todo lo posible para que ese sueño se logrará, él también hizo todo lo posible hasta ahora, dio lo mejor de si en la escuela, fuera de ella en la Academia a la que asistía, sus ahorros en la cuenta de Banco qué había abierto estaban esperados a hacer usados, pues arquitectura no sólo era una carrera costosa en la matrícula sino que también en sus clases, ya se imaginaba salir a comprar un montón de materiales que necesitaría y de solo pensar en eso, su corazón se sentía cálido.
Cada día estaba más cerca de lograrlo, ahora sólo dependía de él.
Necesitaba sacar una de las mejores calificaciones en el examen a la Universidad para poder cumplirlo.
Salió del baño un poco más relajado después de haber tenido esa conversación con su madre, incómoda y forzada pero era lo que ella quería, y  Taehyun siempre la apoyaría en todo.
Sólo se tenían el uno al otro
Sonrió cuando vio el destello del cabello negro de su vecino abrir la ventana para luego entrar por ella.
Seguía pensando que era mucho más fácil entrar por sus puertas, pero era esa cosa especial que los hacía sentir como la primera vez que atravesaron cada uno su ventana luego de besarse bajo el árbol entre las dos casas
—Taehyun, no te quedes ahí, ayúdame— como siempre, Beomgyu era el más torpe en subir, pues sus pies se enredan por miedo a desordenado algo en la decoración que  Taehyun tenía en el muro que dividía la ventana con el piso.
Camino hacia él y tomó sus piernas jalándolo hacía dentro, beomgyu se ayudó con sus manos apoyándolas en los hombros del ahora, pelirosa.
Cuando sus pies tocaron el piso soplo el rostro de Taehyun porque sabía que en el fondo se estaba burlando de él.

—No te rías o me voy—
—No pensaba hacerlo— contuvo su risa y observó el bonito rostro de su novio, este brillaba por la hidratación que sabía que Beomgyu le daba. Sus labios rosas y luminosos por el bálsamo labial que se aplicaba todas las noches. Se acercó a su rostro a robarle un beso porque a pesar de haberse visto en la escuela y en la salida de este, taehyun trabajo hoy y aunque salió temprano, beomgyu le dijo que estaba estudiando y su madre también lo ocupo con aquella charla y la cena que prepararon juntos.
Cuando sus labios se tocaron las sensaciones se hicieron presente, seguía sorprendiéndole que a pesar de el tiempo juntos, beomgyu aún le causará tanto en su cuerpo. Suponía que era normal, pues estaba profundamente enamorado del pelinegro y en algo eso debía influir

Cuando Beomgyu profundizó el beso agarrándolo de la cintura una idea fugas vino a su mente

Estaban a nada de cumplir un año juntos, si se contaba el tiempo en el que habían estado separados, no les faltaba nada para cumplir 11 meses, Taehyun hizo una nota mental de planificar desde ya la cita a la que llevaría a Beomgyu cuando esto pasará.
Luego de eso, volvió a concentrarse en el sabor de la boca de su novio, en el calor que sus cuerpos compartían, en los leves toques que Beom dejaba en su cintura y en todo lo que su corazón sentía.

𝐇𝐘𝐏𝐄 𝐁𝐎𝐘 🐰 𝐓𝐀𝐄𝐆𝐘𝐔 𝐀𝐔Where stories live. Discover now