|020|El secreto de Nana.

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|Capítulo XX|


Jackson suspiró mientras caminaba por la casa vacía, buscó a Jungkook incluso en el jardín, sin embargo, no lo encontró. Caminó molesto hasta la habitación y como loco comenzó a buscar entre sus cosas algo que diera con el paradero del amante de su novio, no había nada que pudiera darle algún rastro sobre aquella persona que tanto deseaba encontrar. A lo lejos visualiza la cámara fotográfica de Jeon que se encontraba sobre su escritorio, sin pensarlo se acercó y la tomó rápidamente, quizás podría encontrar la respuesta aquí. Sin embargo, al encenderla la pantalla se apagó de inmediato indicándole que no tenía batería, frustrado quito la memoria de esta misma y la introdujo en la computadora encendiéndola también, buscó rápidamente entre todas las carpetas una a una pese a ello únicamente había fotografías de paisajes y animales, fueron más de 50 carpetas registradas, sin embargo, nada le ayudaba con el paradero de aquella persona que necesitaba encontrar. Había una carpeta que llamó su atención y comenzó a revisar las fotos que estaban ahí.

-¿Un perro? A este idiota ni siquiera le gustan los perros- Susurra Wang con molestia quitando la foto en donde Jeon salía con el pequeño y peludo can en sus brazos.

Luego de una extensa búsqueda, por fin encontró lo que tanto buscaba.

-¡Joder!- Soltó un grito y sus puños golpearon con fuerza el escritorio -Maldito hijo de puta...- Dijo esta vez en voz baja observando detalladamente aquella fotografía.

Jeon sonreía como no lo hacía desde hace tiempo, a su lado aquel hombre que Jackson buscaba desde hace tiempo. De pronto su ira se convirtió en una escalofriante risa que aumentaba ahora que había visto perfectamente al amante de su novio.

-Es un maldito ciego ¡Jungkook está enamorado de un maldito ciego!- Dijo esto y su sonrisa se esfumó.

Cerró rápidamente la computadora y volvió la memoria a la cámara, no sin antes tomar una copia de la fotografía. Minutos después escucho unos pasos subir por las escaleras hasta que el cerrojo de la puerta se abrió y Jeon entró a la habitación.

-Hola, pensé que no estabas- Le dice Jungkook con su voz tranquila mientras acomodaba su mochila en la silla del escritorio.

-Pedí el día libre - Le responde sin emoción alguna. -¿Qué tal la universidad?

-Bien- Jeon le mira confundido, hacía tiempo que Jackson no le preguntaba por la universidad, sin darle más importancia se quita las botas para luego sentarse en la cama. -Tuve examen hoy, pero estuvo fácil.

-Qué bueno, debo salir, tengo un par de cosas que hacer, nos vemos luego - Se levanta rápidamente de la cama y luego sale de la habitación.

-¿Adiós?- Jeon frunció el ceño confundido para luego voltear los ojos sin darle más importancia.

Vestido con ropa holgada, a pies descalzos suspiraba frente a un lienzo en blanco. A su lado, pinturas de distintos colores esperaban ser mezclados después de mucho tiempo sin uso. Jungkook había dejado de pintar, su estado anímico dependía mucho de las actitudes de Jackson y últimamente ya había perdido toda motivación. En su mente intentaba traer la inspiración, no bastaron ni cinco minutos de pensar y aquel chico de sonrisa grande y encantadora comenzó a adueñarse de su mente, con sus ojos destellantes y su suave piel canela. El jovencito suspiro esbozando una pequeña sonrisa y comenzó a deslizar el pincel intentando recrear aquella perfecta figura.

Las horas pasaban y la cara de Taehyung estaba plasmada en la tela, tras el Jungkook había recreado el parque, el lugar donde solía sentirse libre, donde había visto al ser más bello que en su vida pudo ver y claro, no podría dejar fuera del retrato a Yeontan, si no fuera por ese pequeño animal no sentiría esa pequeña llama ardiendo en su interior.

•A TRAVÉS DE TI• ||TK|| FINALIZADA.Where stories live. Discover now