Capítulo 23. FIESTA.

20 4 15
                                    

07 - Septiembre - 2016
9:43 pm

Nathalya:

Mi cabeza no deja de dar giros, es horrible sentir el estómago revuelto y la opresión en mi pecho que me impide respirar, pero es justo así cómo me he sentido durante todo el día. Hay un enorme peso que me oprime el corazón con una mezcla de rabia, miedo, tristeza y autocompasión; y estoy tan cansada de sentir tanto por alguien que sólo me destruyó a su antojo por lo que justo ahora, continuaré con mi relato intentando liberarme de todo el mal que tu padre me ha hecho sentir durante los últimos años.

El día de esa fiesta, entradas las nueve de la noche comenzaron a llegar sus invitados, primeramente los siete chicos de la pequeña "pandilla" que él había formado, seguidos de algunas de las chicas vagas que siempre estaban pegadas a tu padre, en tercer lugar algunos compañeros rebeldes de la secundaria a la que alguna vez asistió Ángel e inclusive algunos de nuestros primos que sabíamos guardarían el secreto; y así continuaron llegando más y más hasta que fueron al rededor de 45 personas apretadas en la modesta casa, logrando ponerme en extremo incómoda e insegura, sensación que empeoró al cabo de sólo una hora en la que el efecto del alcohol se manifestó en casi todos los presentes.

— ¡Nessrine! — me llamaba tu padre a cada tanto. — ¡Nessrine! ¡Mírame! — pronunciaba tomándome por las muñecas apenas pasaba a su lado, el exceso de alcohol en su sistema comenzaba a notarse en todo su comportamiento y no sólo en su aliento. — ¡Nessrine! ¡Eres tan hermosa! — y me besaba bruscamente frente a sus amigos .

Al cabo de un buen rato, una chica ebria se acercó a nosotros insinuándose descaradamente, yo me sentía en extremo incómoda con los amigos de tu padre mirándome con lascivia, no sé si lo hacían por el alcohol en sus venas o porque eran unos pervertidos pero yo no lograba comprender qué era lo que me veían siendo que yo no era precisamente la chica más desarrollada y menos a comparación de las chicas que los rodeaban, y a pesar de que me sentía protegida entre los brazos de tu padre, el afecto que él demostraba era demasiado posesivo y brusco, cómo si se tratara de marcar territorio y no precisamente de amarme.

Cuando esa chica se acercó sentí la oportunidad perfecta para huir de ahí cómo la cobarde que siempre he sido, pero apenas me había levantado cuando Ángel me tiró por la muñeca haciendo que cayera sobre sus piernas para posteriormente rodear mi cadera con sus brazos y aproximar sus labios a los míos en un beso ansioso que aceleraba cada tanto; cuando por fin logré apartarlo de mi boca esa chica lo miraba furiosa.

— Ángel, ¿y si vamos a otro lado? — le insinuó aún más sus pechos marcados en ese profundo escote.

— Yo no quiero irme. — replicó el tomando de nuevo mi barbilla acercando nuestros rostros.

— ¡Pero es que tú necesitas a una mujer de verdad! — le recriminó caprichosa.

— Ya estoy con una mujer de verdad. — dijo volviendo a besarme.

— Esa sólo es una mocosa que ni siquiera sabe besarte como te gusta. — dijo cruzándose de brazos y manoteando los hombros de tu padre hasta que esté la miró enfadado.

— Te aseguro que ella hace mejores cosas que tú. — dijo molesto mientras me miraba de nuevo — ¿verdad, mi niña? — yo me sonrojé aún más de lo que ya estaba ante esa pregunta y es que todo, absolutamente todo lo que yo había vivido lo había hecho al lado de tu padre y él sabía perfectamente que yo estaba completamente loquita por él por lo que todos mis besos habían sido sólo con él y mi experiencia se limitaba a lo que habíamos hecho hasta esa noche. La astuta chica notó mi sonrojo e incomodidad y la aprovechó al máximo para burlarse de mí y humillarme tanto cómo le daba la gana.

— ¡Pero si mira cómo se ha puesto! — dijo señalándo mi rostro entre carcajadas. — ¡Es que esta niña no sabe ni de qué le estás hablando! ¡Apuesto a que nunca nadie la ha tocado por lo plana que es! Es que sigue siendo una niñita en todo aspecto. — En ese momento tu padre me miró incrédulo.

Cartas de nadie para alguien. Where stories live. Discover now