Fairy Tail: Shinigami

52 Capítulo 52 - Cambio.

Fairy Tail: Shinigami de CORNBRINGER
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[Adan POV]

[Año x776]

Era un día fresco de otoño en Pueblo Magnolia y las hojas comenzaban a cambiar de color. El cielo era de un azul profundo y vibrante y el sol brillaba intensamente en el cielo. El aire estaba quieto y fresco y traía el dulce olor a humo de leña y el toque de especias de la panadería cercana.

Estos últimos meses, que casi se convirtieron en un año, había estado en la ciudad con un permiso de ausencia obligatorio, sin hacer nada más que entrenar y pasar el rato con los demás.

Jugando con Cana, más que nada, practicaría sus habilidades de maquillaje conmigo.

Leyendo con Mavis.

Pelea con Laxus.

Y... entrenando con Erza, quien... bueno, era más que implacable en su búsqueda de la perfección.

Hoy, me habían llamado a la oficina del anciano, para discutir sobre algo que no me había quedado claro, pero si tenía que adivinar que tenía algo que ver con mi degradación temporal hace unos meses.

No hace falta decir que llegué a su oficina puntualmente, llamando a la puerta, hasta que escuché su voz proveniente del interior. "Adelante."

Abrí la puerta y entré, donde el anciano me indicó que me acercara.

"Ha pasado un tiempo desde tu castigo", comenzó Makarov, su voz profunda y llena de sabiduría, "Y, dado que creo que el tiempo lo cura todo, siento que ya es hora de que recuperes el lugar que te corresponde entre las filas de Fairy Tail."

Las comisuras de mi boca se estiraron hacia arriba mientras lo miraba. "Y justo cuando estaba empezando a pensar en cambiar de gremio, tan cerca", dije con una sonrisa, chasqueando la lengua.

"Puedo degradarte de nuevo, mocoso", dijo Makarov con un brillo juguetón en sus ojos, haciéndome reír.

"Solo estoy bromeando, viejo", dije, sacudiendo la cabeza. "Nunca dejaría Fairy Tail, quiero decir, nadie me aceptaría, ya sabes, daños a la propiedad y todo".

Makarov se rió entre dientes, asintiendo con la cabeza. "Ah, sí, sí, nuestra infame reputación de causar daños a la propiedad. Pero no te rechazarían por eso, lo harían por las mentiras que diría sobre ti".

"Está bien", me reí por un momento, antes de tomar una respiración profunda. "¿Y ahora que?"

"¡Vuelve a tomar misiones y haz que este viejo se sienta orgulloso!" Makarov respondió con una sonrisa, dándome palmaditas en el hombro antes de echarme de su oficina. 

Hora de entrenar con Erza.

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[mavis pov]

"¡Ohhh! ¡Está comenzando!" Solté una risita mientras balanceaba lentamente mis pies hacia adelante y hacia atrás sobre el borde de mi asiento.

El sol acababa de salir sobre el horizonte oriental, proyectando una luz dorada sobre el patio de los campos de entrenamiento, Adam había engañado a Gildarts para que se hiciera cargo. 

Adam estaba parado en el centro, su espada de entrenamiento brillaba a la luz mientras esperaba que Erza se acercara.

Erza entró al patio, su propia espada lista, mientras se inclinaba respetuosamente ante Adam, antes de tomar su posición frente a él, habían pasado meses desde que Adam comenzó a entrenar con Erza, casi a diario, y hoy no fue diferente, pero a pesar de los días de entrenamiento, todavía luchaba por darle un golpe.