El regreso del demonio celestial

Capítulo 6

Capítulo 6

Doffy observaba desde una rama cercana, observando la espalda del poderoso hombre mientras se marchaba. Eso había estado cerca. Quienquiera que fuera, era poderoso. Si no hubiera matado a esa serpiente gigante y regresado cuando lo hizo, no sabía qué habría pasado con Sakura y Sasuke. Miró a la otra serpiente gigante, estaba silbando mientras buscaba en el bosque, probablemente buscándolo a él.

¿Qué eran estas cosas? Parecían casi inteligentes y habían aparecido de la nada, completamente ocultos de su Haki. Eso era peligroso, aún no había encontrado nada que pudiera esconderse de su Observación Haki, pero estas serpientes habían hecho precisamente eso. Si ese hombre fuera capaz de hacer algo similar...

Doffy abrió los brazos, liberando varios hilos de las yemas de sus dedos, envolviéndolos alrededor de la serpiente. Comenzó a agitarse, dándose cuenta de que había sido capturado y sintiendo las cuerdas afiladas como navajas clavarse en su piel. Doffy tiró, conduciendo lentamente sus cuerdas más adentro de la bestia. Siguió tirando hasta que terminó, sus cuerdas habían cortado completamente a la criatura en múltiples pedazos. Saltó hacia abajo, aterrizando cerca de su cadáver para examinarlo. Parecía ser una serpiente ordinaria, aunque muy grande, nada realmente destacable para él.

Bueno, hasta que estalló en humo. Doffy saltó y salió del humo, forzando su Haki para detectar cualquier ataque entrante. Esperó un minuto, sin sentir ninguno, luego relajó su guardia. Miró hacia abajo, preguntándose de dónde había venido el humo, estaba desconcertado por lo que vio. El cadáver de la serpiente había desaparecido, como si nunca hubiera estado allí en primer lugar.

Doffy sacudió la curiosidad de su cabeza, tenía cosas más importantes de las que preocuparse. Se movió para alcanzar al resto de su equipo, pensando en el hombre con el que había peleado. Era fácilmente uno de los hombres más poderosos que había conocido desde su renacimiento. El hombre era habilidoso, inteligente también, detectando y destruyendo rápidamente sus hilos, el primero en hacerlo además de Vergo, que ya sabía sobre ellos.

Eso no era lo único que lo hacía peligroso. Ese hombre era como las serpientes que le había enviado. El hombre era difícil de golpear, su cuerpo parecía ser maleable y sus poderes de regeneración asombrosos. Observó a través de los ojos de su clon mientras su piel se curaba rápidamente de las marcas de quemaduras, muy probablemente debido a una de las técnicas de Sasuke. Lo que más le preocupaba eran sus ojos, mirando a su clon con una mirada casi posesiva. No sabía qué quería el hombre, pero haría todo lo posible para matarlo la próxima vez que lo viera.

Saltando de rama en rama, se detuvo, su Haki sintió algo interesante. Giró hacia la derecha, sintiendo una extraña presencia muy, muy lejos, más adentro del bosque. Bueno, más exactamente eran dos presencias, ambas viviendo en el mismo cuerpo. Quienquiera que fueran, también eran fuertes. No al nivel del que acababa de pelear, pero peligroso a su manera. La situación le recordó algo, colocando una mano sobre su estómago.

Pensando en retrospectiva, había pasado bastante tiempo desde la última vez que visitó al viejo zorro gruñón. Para ser honesto, sus visitas fueron más por curiosidad que por otra cosa, ya que nunca había visto una criatura como el zorro de nueve colas. Lo visitaría, al menos supuso que era un macho, la voz profunda y atronadora lo sugería, simplemente manteniendo una conversación ociosa, observando con interés cómo la bestia también lo observaba. se preguntó qué estaría pasando por su mente, qué pensaría cuando lo miraba así, como si no pudiera creer lo que estaba viendo. Doffy sabía que era un personaje bastante único, pero ni siquiera eso explicaba la mirada del zorro.

Doffy suspiró, realmente necesitaba pensar en un nombre para esa alfombra gruñona, si es que aún no tenía uno. Se estaba cansando de llamarlo simplemente 'Zorro' o 'Nueve Colas'. Pensó en visitarlo ahora, preguntarle qué sabía sobre lo que le estaba diciendo su Haki. ¿Podría haber más de ellos por ahí? ¿Más de estas bestias con cola? No lo sabía, pero tampoco tenía tiempo de averiguarlo, todavía tenía que recuperar a Sasuke y Sakura. Se volvió hacia el centro del bosque y continuó su camino hacia su equipo.