Capitulo 24

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capitulo 24

Naruto sonrió ampliamente, mirando a la figura frente a él. El hombre era alto, tal vez incluso más alto que Jiraiya. Tenía el pelo corto y rubio y elegantes gafas de sol rojas con montura plateada. Su ropa era bastante extraña, especialmente el gran abrigo rosa que cubría sus hombros.

Ante la proclamación de su nombre, el hombre parecía tener una expresión extraña en su rostro, una mezcla de molestia y alguna otra emoción que no podía identificar. De cualquier manera, Naruto puso la apariencia del hombre a un lado por un momento, mirando a su alrededor y tratando de averiguar dónde estaba.

"Uhh, entonces, ¿dónde estamos de todos modos?"

Naruto se rascó la nuca mientras observaba la habitación oscura en la que se encontraba, la única luz provenía de múltiples tragaluces muy por encima de su cabeza. Se cruzó de brazos, tratando de recordar cómo había llegado hasta aquí. Recordó haber perseguido a ese tipo, Mukade, cuando...

"¿Qué es lo último que recuerdas, Naruto?"

Naruto miró al hombre sorprendido, sus pensamientos fueron interrumpidos. Naruto asintió para sí mismo brevemente, queriendo responder la pregunta del hombre. "Bueno, estaba siguiendo a este tipo malo, Mukade o lo que sea, cuando apareció este enorme pilar de luz. Lo siguiente que sé es que estoy aquí".

Naruto asintió para sí mismo una vez más, satisfecho con su explicación. Luego, volvió a mirar al otro hombre y de repente se dio cuenta de que no sabía cómo llamarlo. "Oye, ¿y tú? ¿Cómo te llamas y dónde estoy?"

Naruto inclinó la cabeza confundido, entrecerrando los ojos como parte de un hábito suyo. El hombre pareció dudar en decirle su nombre, Naruto esperando una respuesta. El hombre abrió la boca, estaba a punto de responder a su pregunta cuando fue interrumpido, algunos escombros cercanos fueron levantados y arrojados al suelo de piedra con un estruendo atronador.

El polvo brotó del sitio, Naruto y el otro hombre miraron hacia él. Su entrenamiento comenzó entonces, recordando las tácticas de emboscada que tanto le gustaban a Mukade con sus títeres. Agarró su hoja de chakra de su bolsa, saltando entre la perturbación y el hombre que acababa de conocer, sosteniendo la hoja frente a él a la defensiva.

"¡Ponte detrás de mí!", ordenó, entrecerrando los ojos mientras trataba de ver a través del polvo y los escombros. Podía ver la sombra de una figura en el polvo, una forma humana que se hacía reconocible. Escuchó toser y vio un brazo que se agitaba, no un títere entonces.

Aún así, podría ser un enemigo o incluso el mismo Mukade. No bajaría la guardia. No, en todo caso, él debería dar el primer paso. No podía permitirse el lujo de protegerse a sí mismo ya la persona que tenía delante. Se movió rápidamente, pateando el suelo y corriendo hacia la figura mientras se recuperaba.

No usaría Shadow Clones, podría hacer que perdiera el elemento sorpresa. Se lanzó hacia la figura, cortando el torso de la figura pero conteniéndose, no queriendo herir gravemente o matar a la persona y darse tiempo para detenerse si reconocía a la figura como un amigo.

Se acercó, el polvo se aclaró cuando su espada atravesó el aire, permitiéndole a Naruto ver claramente a su oponente por primera vez. Su cabello era oscuro, negro y puntiagudo con una banda para la cabeza en la frente, un lado que cubría uno de sus ojos de una manera familiar. Naruto miró al reconocer el rostro de la persona a la que estaba atacando, su brazo perdiendo fuerza en su ataque. "¡¿S-Sasuk-...?!"

Ni siquiera tuvo la oportunidad de decir su nombre, el parecido a Sasuke lanzó una mano y agarró la muñeca que sostenía su espada. Naruto trató de reaccionar con una patada para liberarse antes de que el dolor estallara en su estómago, lo que lo hizo mirar hacia abajo mientras el aire escapaba de sus pulmones.

El regreso del demonio celestialWhere stories live. Discover now