Capítulo veintitrés: "Celedonias".

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Tw: Ninguno. Puros geis siendo geis.

¿Qué tal estos meses?

"Louder, lips speak louderBetter, back togetherStill it's a shock, shock to your soft side

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"Louder, lips speak louder
Better, back together
Still it's a shock,
shock to your soft side."
Soft Shock. Yeah Yeah Yeahs.

Aemond lo estaba besando.

¿Por qué iba a ser eso remotamente distinto a lo sucedido hace semanas en la disco? No lo era.

Pero sí lo era. Porque en ese momento estaban enojados, contra el tiempo, sin una motivación lógica salvo el indudable deseo adrenalínico que definitivamente permaneció en ellos después de ese primer contacto. Luke podía admitir que besarlo en ese momento se había sentido igual que una carrera.

No estaba acorralado en ese instante, pero la emoción fue la misma; peligrosa y adictiva. 

Besar a Aemond era como jugar a la ruleta rusa. No tenía idea de si el próximo disparo provocaría su muerte o el placer de seguir vivo.

La boca de Aemond provocó un torbellino en su cabeza. Arrasó con el contenido lógico de su mente y dejó en su lugar un cúmulo de ideas débiles y atontadas. Sus labios sabían a menta, eran tibios, húmedos, suaves y blandos. Atajaba cada movimiento torpe y lo transformaba en un baile acorde. Y Luke se sintió débil. Todo en él de pronto era frágil y maleable, y eso no estaba bien. No era correcto. No debía ser correcto. No era bueno. 

Primero agarró la mano en su rostro, siguiendo su propio reflejo de autodefensa y disponiéndose a alejarlo. Porque había sido repentino y Luke definitivamente no se había preparado para esa emboscada. No tenía idea de cómo reaccionar, qué era lo que ese sujeto esperaba en primer lugar; y lo que su propia mente gritaba era esa alerta constante de que ya era tiempo de escapar.

¿Cómo sabía si esa no era alguna treta? ¿Una venganza? ¿Qué pasaba si en realidad Aemond esperaba distraerlo para después lanzarlo por el edificio? ¿Golpearlo por obligarlo a hablar?

Luke notó que Aemond se detuvo cuando sus dedos entraron en contacto. Fue inmediato, robótico. Aún compartían el aliento, Luke aún podía saborear su respiración cálida chocando suavemente contra su boca y su rostro aún estaba entre sus manos. Sus narices se rozaban. Sus labios se rozaban. 

Se descubrió petrificado, incapaz de alejarlo e incapaz de seguirlo. Sintiendo el hormigueo que permanecía en su piel cuando los pulgares de Aemond siguieron algún patrón inexistente sobre sus mejillas. Debían estar calientes, porque las falanges de Aemond se sentían notablemente heladas. Alejó la extremidad de su rostro manteniéndolo sujeto por la muñeca y notó el suspiro que Aemond emitió. 

Su cabeza maquinaba a toda velocidad las posibilidades. Si debía ser mejor alejarse ahora, o tantear el terreno. ¿Qué perdía intentándolo? Solo su propia estabilidad mental porque él definitivamente pasaría mucho tiempo pensando en porqué hizo lo que hizo. Quizás era su propia adicción a la adrenalina; quizás era la abstinencia a esta misma ahora que no podría correr en meses.

Wicked Game [PGP2024]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora