I'm not a good guy

Capítulo 9

Louis sonreía. Aquel perfume varonil impregnado en el cuello de Zayn, a quien seguía abrazando, estaba muy agradable. Se sentía cálido por todos lados, pues el mayor seguía con sus brazos alrededor suyo, pasando su mano en vagas caricias por la espalda de Louis.

—¿Ya has cenado? —preguntó de pronto.

Louis asintió—. Sí. ¿Tú has cenado?

Zayn torció una mueca. Necesitaba que Louis dejara de hacer eso. Preguntar cosas... Personales. Sí, eso. Dejar de preguntar cosas como si en realidad le importaran, o... ¿lo hacían?

—No. Pasaremos a comprar algo y después veremos a dónde vamos.

Louis asintió, separándose finalmente de Zayn. El pelinegro encendió la motocicleta, se colocó el casco y miró a Louis, quien seguía de pie a su lado sin parecer que quería moverse.

Zayn lo observó unos momentos más, Louis seguía mirándole con ojos grandes—. ¿Qué? —espetó.

Louis sonrió apenas, señalando el casco encima de su cabeza. El mayor frunció un poco el ceño y con lentitud se lo sacó de encima una vez más.

—¿Quieres llevarlo tú...? —intentó preguntar, pero las suaves manos de Louis llegaron hasta sus mejillas y después sus suaves labios atraparon los suyos.

Era extraño, debía admitirlo. No había tenido muchas experiencias así de cercanas, y no hablaba de besarse o follar. Si no de... Esas experiencias que removían algo en su interior. Que le hacían querer sentirlas siempre. Era jodidamente raro, pero no tenía intención de deterlo.

Lo besó también, con lentitud y ojos cerrados. Posando sin pensar sus manos en la cintura del más bajo para atraerlo más a su cuerpo, apretando sus dedos en la piel blanda, disfrutando de toda la calidez.

—Úsalo —dijo Zayn cuando se separaron. La luz de los faroles dejando a ver el bonito rostro de Louis, que parecía brillar opacando todo a sus espaldas. Como si existiese un enfoque, solo encima suyo.

Se miraron por unos momentos más, hasta que Louis tomó el casco y lo puso encima de su cabeza. Sonriendo, dejando ver lo feliz de sus ojos detrás de aquel plástico transparente.

—¿Paresco un power ranger? Me gustaba la de color rosa cuando era niño. —comentó, dejando a Zayn con la mirada fija en la nada cuando se movió lejos de su alcance visual.

Louis subió a la motocicleta, llevando sus manos alrededor del torso de Zayn, sujetándose firme y recostándose de lado en su espalda. El pelinegro encendió el motor, dando una palmada suave a la rodilla de Louis a su costado.

—Qué es lo que me haces —mencionó para sí mismo, acelerando para salir a toda velocidad.

☹︎☺︎

Cuando la motocicleta de Zayn se detuvo, Louis abrió los ojos saliendo de aquel relajante viaje en el que había estado sumergido durante no sabía cuánto tiempo. Se había dejado llevar por la rica fragancia que inundaba en el casco de Zayn, olía al pelinegro, a su perfume, y Louis se había quedado disfrutando de ello tanto como pudo.

Pero tuvo que moverse cuando Zayn apretó su muslo. Miró alrededor y no supo si era un buen escenario para estar durante casi la media noche.

Un callejón.

Daba miedo, sí. Era tétrico, también. Extrañas figuras danzaban en la oscuridad, por supuesto.

Se sacó el casco y parpadeó, asegurándose de que el lugar era real.

Lo era, sin embargo, le pasó el casco a Zayn y con lentitud bajó de la moto. Miró al pelinegro con ojos grandes, y tan pronto Zayn terminó de acomodar y sacar las llaves, Louis tomó su mano. Porque por alguna razón, si algo extraño sucedía en aquel callejón, tenía a Zayn. No sabía exactamente para qué, pero algo le decía que el pelinegro no iba a soltarle en caso de que se aferrara a él.