Capítulo 25

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Oliver

Cuando llegamos a la nueva casa en un vecindario mucho más seguro y con reporte sin entrada por ningún otro lado, hemos instalado nuevas cámaras, la casa es sencilla con dos habitaciones, dos baños, sala y cocina más estacionamiento con dos patios, frente y trasero. Hemos comprado nuevas cosas y ya estamos amueblando todo.

He comprado todo lo que Maddie necesita para todos sus diseños perdidos, no quiere ver a nadie ni hablar con nadie. Hemos pedido en la universidad todo de manera virtual y nos han comprendido de manera excelente, ha comenzado con nuevos diseños.

Pero entra en crisis y rompe todos sus diseños, hemos estado mejorando con eso. Cuando entra en crisis viene conmigo y vamos a una habitación en un lugar donde puede romper cosas con un equipo de seguridad para ello.

Grita, llora y rompe todo a su paso y así se quita el estrés y las frustraciones sobre el incendio, también le cuesta dormir debido a las pesadillas de que se incendia mientras estábamos adentro y moríamos.

Despierta llorando y la abrazo contra mí para poder calmarlo. Le susurro que estamos bien y nadie nos hará daño.

—Le conté a la empresa que nuestra casa se había incendiado y había perdido todo. Me dieron tiempo para reponer mis diseños, así que tengo dos meses para terminar todo.

—¿Y estás lista para ello?

—Sí. Hablé con Alexa y Bianca sobre sus trajes y ellas dijeron que no importaba, que era más importante que estuviéramos bien. Todavía no me acostumbre a no tener una presión constante sobre mis hombros.

Me acerco a ella, le aparto el cabello de los hombros y le doy un beso en la clavícula.

—Te lo dije, pequeña bestia, no te estreses.

—Por cierto, lo siento por lo de tu traje. Estoy trabajando en hacerte uno nuevo.

Asiento mientras la beso, lleva puesta una de mis camisetas y calcetines, pues no hemos podido comprar mucha ropa, pero prefiero que pase en mi ropa siempre y esté solo conmigo.

—Gracias por esto, ya llevo algunos diseños y mucho mejores.

—Ese incendio te prendió el cerebro, ¿eh?

Gira los ojos, pero sonríe y me besa una última vez antes de volver a la segunda habitación donde la ha tomado para que sea su oficina personal, pasa horas ahí mientras yo la acompaño a veces, o voy a mis reuniones.

Hemos buscado información de Caroline, pero es como si se hubiese desaparecido de la faz de la tierra, no se ha visto por ningún lado desde hace un mes, hemos revisado cámaras de seguridad, pero ni quiera se ha asomado por nuestra casa, lo que es muy raro ya que han salido los últimos bolsos de nueva edición y no se han registrado sus tarjetas, ni las de su familia.

Así que ha estado oculta y no hemos podido dar con ella, pero la tenemos agarrada por todos lados, en cuanto dé un paso a la luz la atrapo y me encargo de ella.

Le dije que no se acercara a Maddie.

Y la jodió.

Así que yo la joderé a ella.

—¿Oliver? —Maddie me habla y me saca de mis pensamientos.

—¿Sí?

—Me acaba de escribir nuestra diseñadora de interiores para que vayamos a ver el proyecto. ¿Vamos ahora?

—Sí.

—Bien, iré a cambiarme y vuelvo.

Se va y termino de ajustar la llanta, reviso todo verificando que no me falta nada. Voy hacia adentro para limpiarme las manos y la cara, cuando me pongo la camisa, Maddie ya sale vestida. Subimos al auto y vamos hacia las tiendas, al final lo pensó bien y abrió dos en diferentes puntos muy reconocidos.

Unidos por un Error Where stories live. Discover now