Un amor por interés - Ale y Ana

Capítulo 5

Narra Alejandra:

Me levante con el ánimo al cien, la razón hoy vería a Ana y estaría viéndola seguido en mi empresa, fue la mejor noticia que me pudo haber dado, me apure a alistarme, desayune y me dirigí a mi empresa.

Cuando llegue vi un auto estacionado cerca de la entrada y vi a dos personas platicando afuera del carro, era un hombre y Ana?, no entiendo ella me dijo que no tenía novio, el chico estaba demasiado cerca de ella, que por cierto se veía más hermosa que nunca, traía un vestido que me dejaba ver sus largas y hermosas piernas, me quede observándolos y pude ver que el chico estuvo a punto de besar a Ana solo que ella se movió y el beso se lo dio en la mejilla, sentí una presión en el pecho, creo que eran celos?, no sé pero vi que ella me vio y se sorprendió un poco, después decidí meterme y no torturarme más viéndola.

Le dije a mi asistente que llevará a los chicos nuevos a la sala de juntas y ahí iría yo a presentarme y a decirle en qué consistía su servicio, le pedí que me avisara cuando los cuatro estuvieran ahí y así lo hizo.

Todos fueron muy puntuales cuando entre a la sala de juntas me encontré con la mirada de Ana y desvíe mi mirada, seguía molesta por lo que vi ella me dijo que no tenía novio y ese chico parecía serlo, por qué me había mentido?

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Narra Ana:

Cuando Alejandra entró a la sala nuestras miradas se cruzaron y ella desvío su mirada, al parecer estaba enojada y no sé qué estaría pensando, pero me dolió que me ignorara, todo por el idiota de Gabriel.

Alejandra: Bueno chicos me presento yo soy Alejandra Rocha dueña y jefa de esta empresa y yo les asignaré sus tareas en la empresa, antes que nada me gustaría que se presentarán, pero uno por uno, Así que los iré llamando uno a uno a mi oficina para hacerles una pequeña evaluación y decirles después cual será el trabajo que desempeñarán aquí están de acuerdo? - todos asentimos.

Alejandra: De acuerdo a ver primero las damas así que haber - miro unas hojas - Gladys, quién es?

Gladys- Soy yo señorita Rocha

Alejandra: perfecto acompáñeme a mi oficina señorita - se levanto - con permiso chicos ahorita los mandare llamar, mientras quédense aquí pueden tomar café y galletas que están ahí- señaló una mesa nosotros asentimos y ella se fue con Gladys y no me dirigió su mirada para nada lo cual me dolió.

Nos paramos tomamos un poco de café y galletas y empecé a platicar con Eduardo y Kimberly, los conocía solo de vista, pero eran realmente unos chicos muy buenos, me cayeron muy bien, aunque Kimberly comentó que le gusto Alejandra y eso me dio celos.

Después de 10 minutos regreso Gladys y le dijo a Kimberly que era su turno, me dieron celos de pensar que Alejandra estaría sola con ella y que Kimberly acababa de confesar que le gustaba ella, estaba un poco impaciente Gladys me pidió que me calmara, ya le había contado a ella sobre Alejandra y lo qué pasó en la mañana y me calmo, me dijo que cuando la viera le explicará las cosas y listo.

Gladys salió después de 15 minutos, por qué se tardó más con ella si con Gladys fueron solo 10 minutos? Kimberly le dijo a Eduardo que era su turno yo me moría de nervios Alejandra estaba enojada que por eso no me pasaba aún.

Después de 10 minutos más salió Eduardo y me dijo que era mi turno, con mis piernas temblorosamente me dirigí a su oficina toque la puerta y escuche el "adelante" abrí la puerta y ahí estaba ella sumergida en unos papeles, tan hermosa como el día en que la conocí.

Ana: ho..hola Ale..en - tartamudeé

Alejandra: Hola señorita Melgar le voy a pedir de favor que en horario de trabajo me trate de manera formal por favor- dijo sin voltear a verme- Ahora tome asiento por favor.

Ana: claro y disculpe señorita Rocha, no quería ser una mal educada- agache la mirada, me dolió tanto que me tratara así.

Alejandra: no se preocupe señorita Melgar, solo quiero evitar malos entendidos, no quiero que tenga problemas con su NOVIO - dijo de manera fría y recalcó la última palabra.

Ana: Oh! No se preocupe entiendo, y yo no tengo novio ya se lo había dicho.

Alejandra: Si? Pues no pareció eso, el joven la iba a besar o me equivoco- volteo a verme y sus ojos eran un tanto fríos.

Ana: No, tiene razón, no se equivoca, él quería besarme, pero yo no lo quería besar a él, él quiere conmigo lo conozco desde que éramos niños, pero él no me gusta yo le dije que solo podemos ser amigos y - me interrumpió.

Alejandra: no tiene por qué dame explicaciones señorita

Ana: lo sé pero quiero hacerlo, Alejandra en verdad crees que yo te habría dicho que quería volver a salir contigo sabiendo que tengo novio? Qué clase de persona crees que soy? - dije un poco dolida.

Alejandra: perdón Ana tienes razón, no sé qué me pasó, creí que me habías engañado y que tenías novio, eres tan hermosa que es difícil creer que no tienes novio, pero claro pretendientes no te faltarán seguramente.

Ana: pues créelo no tengo novio, es más nunca lo he tenido, no ha llegado la persona indicada la sigo esperando- dije mirando sus hermosos ojos.

Alejandra: enserio? Nunca has tenido novio?

Ana: en verdad, estoy esperando a la persona indicada, a la persona que mueva mi mundo- suspire

Alejandra: wow! Espero que pronto llegue esa persona Ana.

Ana: creo que ya llego - baje la mirada y me sonroje

Alejandra: así? Y cómo es?

Ana: muy hermosa, pero bueno me vas a hacer mi examen?

Alejandra: si claro - me sonrió de la manera más dulce y tierna posible

Me hizo mi examen y después me dijo que la acompañara a la sala de juntas a hablar con los demás chicos, antes de salir me invito a comer con ella después del trabajo y obvio acepte.

Llegamos a la sala de juntas nos asignó trabajos a cada uno y a mí me dijo que quería que le ayudara a ella con unos documentos, así que nos la pasamos toda la mañana y parte de la tarde juntas trabajando, era demasiado divertido y fácil el trabajo con ella, realmente nos acoplamos tan bien, hacíamos muy buen equipo.

Cuando salimos fuimos a comer, era increíble como la plática fluía de manera natural con ella, me encantaba platicar con ella, nos platicamos nuestra vida entera yo omití cierta información de la empresa de mi padre.

.....

Pasaron los días demasiado rápido Alejandra y yo cada vez nos conocíamos mejor y cada día me enamoraba más de ella, a pesar de que Gabriel y papá me dijeron que no podía enamorarme de ella, era inevitable la quería, la quería demasiado.