Let you go

Chapter 26

La adrenalina corría por las venas del omega; el olor de excitación y las feromonas del alfa le nublaban la vista, impidiendo cualquier pensamiento coherente.

Su lado humano estaba totalmente cegado por su lobo, que había tomado el control absoluto sobre él; complacer a su alfa era lo que le pedía.

Inclinó su cabeza permitiendo el acceso a su cuello;Yoongi no tardó en atacar, succionando y dejando pequeñas mordidas. El menor se frotaba sobre el miembro de su alfa, gimiendo tan solo de sentir lo duro que estaba y lo mojado que se sentía.

-Yoonie, esto ... nos pueden ver- dijo entre gemidos, apenas siendo capaz de completar la frase.

-Entonces deberíamos de hacer esto rápido- dijo mirándole a los ojos.

Y fue la primera vez que Jungkook vio los ojos lobunos del alfa. Dorados, resaltando sobre lo pálido de su piel.

Jungkook unió sus labios en un hambriento y desenfrenado beso. Las manos del alfa se apresuraron al botón del pantalón del menor, quien inmediatamente levantó su cuerpo apoyándose en los hombros del alfa, permitiendo así que Yoongi bajara su ropa, dejando su miembro expuesto; rápidamente se ocupó de su propia ropa, sacando su miembro.

-Se un buen omega y montame- le ordenó con una sonrisa ladina.

El omega,completamente perdido por la lujuria y el morbo; se dejó caer sobre el duro miembro de su alfa, soltando un grito al sentirlo completamente dentro.

-¡Alfa!- gimió en un grito.

-Vamos mi omega, enséñale a tu alfa lo bien que lo puedes montar-

El omega estaba encantado, tomó la mandíbula del alfa, atrayendo su rostro cerca del suyo y lo besó.

Jungkook comenzó a moverse, subiendo y bajando lentamente, haciendo que los gemidos de su alfa se silenciaran en su boca. Poco a poco comenzó a aumentar su ritmo, subiendo y bajando cada vez más rápido.

El sonido de los acalorados gemidos y de sus pieles chocando era todo lo que podían escuchar, sintió sus rodillas arder ante el roce con el asiento, pero ni ese dolor le impedía parar.

-Mirame alfa, quiero que me veas cuando te corras- le dijo el omega.

Yongi sonrió con malicia, tomando las caderas del menor, guindolas . Las estocadas se volvieron duras, profundas.El pobre omega sentía el miembro de su alfa tan profundo como nunca antes, gimiendo sin mayor pena, gritando del placer que su alfa le daba.

-Vamos omega correte, quiero que te corras sobre mi, correte para tu alfa-

El omega asintió, dejando caer su cuerpo cada vez con más fuerza.

-Oh Yoonie, me follas tan bien- gemía el omega.

Las estocadas no pararon hasta que los dos se corrieron en un escandaloso orgasmo.

Yoongi abrazó el tembloroso cuerpo de su omega, disfrutando de los últimos momentos del orgasmo.

-Yoonie, te ensucie todo- se disculpó el menor, mirando la sudadera del alfa.

-Sabes que no me importa pequeño- le dijo para después darle un beso en la frente.

El omega sonrió satisfecho, mirando a su alfa, lo beso.

El alfa comenzó a embestir una vez más, suavemente, al ritmo de sus besos, el omega se sorprendió por un instante, pero se dejó llevar, siguiendo el ritmo de su alfa.

Las embestidas poco a poco subieron su fuerza, pero sus labios jamás se separaron, los gemidos eran ahogados en la boca del otro. Las manos del omega se movieron bajo la camisa del alfa, arañado a su paso.