Extra 1

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Idea no incorporada en la historia. 

Luego del accidente, cuando Neil vuelve a las prácticas, pelea con Andrew por su indiferencia. Apuestan a que no puede ganarle en los tiros. Si Neil gana, el rubio se esforzará más. Si Andrew gana, le pide que viaje con ellos. Neil pierde.

Al día siguiente, evita mirar el otro lado de la cancha. Evita que le importe lo que sucede y el poco entusiasmo del otro arquero. Trata que su molestia no aumente.

Funciona. Hasta después del descanso. Su mirada no para de dirigirse al cuerpo inmóvil al otro lado y está harto de su desinterés. Se da cuenta de que se está moviendo al otro lado de la cancha cuando Kevin lo llama a gritos confundido, ve las miradas de curiosidad de todos, pero evita mirar a nadie. No puede sacar los ojos de Andrew. Su molestia a segundos de explotar. El pequeño portero sabe que se está acercando, no es tonto, a pesar de todavía no lo mira a la cara.

Neil es precavido, generalmente se pondría a un brazo de distancia de otra persona, pero una mirada alrededor le dice que los backliner están muy cerca de ellos y no quiere que nadie escuche. Así que evita que se note lo tenso que está y se acerca lo más que puede a Andrew, evitando tocarlo. Aún así, el otro todavía no le presta atención. Neil agarra la red de la raqueta de Andrew para que lo mire, hasta que finalmente lo hace.

Los ojos de Andrew emiten aburrimiento, cualquiera podría decir que no le importa la cercanía, ni que le retengan la red. Pero Neil puede ver en sus ojos algo de furia, algo tan intenso que pone la piel de gallina al pelirrojo. No se aleja.

-Dime una cosa- dice Neil, apretando la red entre sus manos- ¿por qué estás aquí si no entrenas?

-Porque el entrenador me dijo que debo estar acá- su voz suena algo ronca, como si no hubiera hablado en horas, capaz días.

-Entonces entrena.

-No puede obligarme, mientras esté aquí y no deje pasar tiros en los partidos. No le debería importar si no me muevo o no- su mirada ya se empieza a dirigir hacia otro lado. Neil agarra con más fuerza la red de la raqueta y la empuja, acercando un poco más su rostro al otro. Andrew entrecierra los ojos, pero no deja de mirarlo, al menos Neil logró eso. Siente a Nicky tratar de hablar detrás de ellos. No intenta escucharlo. Seguramente todos han dejado de entrenar para observar el espectáculo. Hasta Wymack debe estar mirando desde detrás de las paredes.

-Exacto, por qué estás aquí si no te interesa. ¿Es por tu beca? ¿Que tu hermano y primo tengan una? ¿Qué demonios quieres para que te esfuerces?

-Yo no quiero nada.

-Algo te mueve, lo sé. Lo vi en el partido contra los Binturones.

Neil no se espera la intensidad de la mirada de Andrew, casi hasta ve sorpresa en sus ojos, una pregunta.

-Lo vi en un video que me mostró Wymack- y con eso, el pelirrubio vuelve a cerrarse. Neil tiene que impedir que lo haga, sino esta conversación no tendrá nada de sentido- hagamos una apuesta. Veamos si puedo meter 3 tiros en tu portería.

El rubio lo observa, ladea la cabeza, pensando.

-No estoy interesado.

-Si ganas, te dejo en paz.

-Sabes que puedes ofrecer algo más interesante- frunzo el ceño ante eso, ¿qué puedo tener que lo motive a aceptar el reto?

-Yo...

-Bien. Si ganas, entreno todos los días- levanta un dedo y lo aproxima hacia mi rostro, debo alejarme unos centímetros para no bizquear- solo debes meter un tiro y lo haré.

Neil lo mira con desconfianza.

-¿Y si tú ganas?

-Te lo diré una vez que pierdas.

-No voy a perder- me observa.

-Creo que estás un poco oxidado.

-Tú también- digo, y debería ser verdad, no se ha movido en días. A pesar del tiempo en el hospital y el descanso en casa de Wymack, Neil volvió con todo en el entrenamiento. Sabía de la destreza de Andrew, pero deberían entrar en equilibrio en este momento.

-¿Aceptas o no?- Aprieto con fuerza la red del rubio, aún más molesto que antes de la conversación, pensando qué decisión tomar.

-Bien.

Se suelta de mi agarre y estira los hombros, nunca deja de mirarme mientras se mueve y se acomoda en la portería.

-Comienza, pinocho- La palabra golpea y confunde a Neil, pero decide ignorarlo mientras se mueve hacia la marca de tiros. Los defensores observando y comprendiendo lo que sucede.

-Neil, ¿qué estás haciendo?- pregunta un Nicky nervioso. Agarro la pelota de sus manos, sin contestarle, enfoncándome en ganar.

-¿Vas a hacer tiros contra él?- comenta Allison con una sonrisa- lástima que Renee se lo esté perdiendo por estar con el entrenador.

-¿Qué está sucediendo?- Dice Dan, luego de llegar trotando desde su posición.

-Van a pelear- responde la rubia.

-¿Qué?- dice Kevin, llegando- Andrew no te has movido en días, ¿ahora lo haces?

-¿Qué esperabas?- dice Aaron con el ceño fruncido.

Intento no escucharlos, me paro en la línea, observo la meta y disparo. Es un tiro simple, con fuerza, apuntando hacia la esquina inferior izquierda. Atrapa la pelota en su red sin mucho esfuerzo.

-Inténtalo en serio- dice el rubio, haciéndome enojar.

-Andrew está hablando- susurra Nicky.

-Oh por Dios, empezó mi novela.

-Allison, silencio- responde Dan.

Lanzo el segundo, mejoro mi posición y mi postura. Muevo la raqueta de tal manera que piense que apunto hacia la izquierda, pero mi objetivo es la derecha. La pelota se acerca hacia la línea de meta, pero Andrew aparece un segundo antes de que toque la red.

-Neil- empieza Kevin

-Silencio, Kevin- casi estoy gruñendo, me queda un tiro.

Hago tres pasos hacia atrás y comienzo a correr hacia adelante, un segundo antes de pasar la línea de tiro, golpeo con todas mis fuerzas. Un rayo de esperanza pasa por mi mente, que logré mi objetivo y gané la apuesta, Andrew comenzaría a entrenar, pero, por tercera vez, mi tiro es detenido.

Me quedo parado, viendo que el arco nunca se puso en rojo. El rubio se saca lentamente el casco y se acerca hacia mí. No lo miro, esperando con temor lo que quiere de mí.

-A partir de mañana, comenzarás a andar en el auto con nosotros- y sin más, se dirige hacia la puerta de la cancha.

-¿Qué?- digo, volviéndome hacia su dirección, pero no consigo respuesta.

-Nunca ibas a ganarle- me dice Kevin enojo, respiro para no golpearlo- han entrenado por más de un año juntos, él sabe todos tus movimientos y tú apenas sabes moverte en la cancha en este momento.

Él tiene razón. Soy un idiota, ahora estoy atrapado con ellos en el auto, ¿que intentarán hacerme?

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Sorpresa! Aparecí por segunda vez hoy :)

Razones de por qué no entró a la historia:

Me parecía muy cursi y tonto que se hicieran tiros después de semanas sin hablarse. Necesitaba que Andrew comenzara a entrenar, y si ganaba, no lo haría, por lo que opté un intercambio, los dos ganaban :) Además, Neil es más de palabras, Andrew no hubiera aceptado (eso pienso yo)

Instante - AndreilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora