🍂 Falling🍂[Four Seasons #3] - [COMPLETA]

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*—Hazel:

Esta era la mejor fiesta que había tenido en su vida y el que las personas más preciadas y cercanas a él estuvieran en esta celebración le alegraba la vida.

Hazel nunca creyó que su familia y sus amigos estarían en el mismo lugar celebrando su cumpleaños y que tampoco que las asperezas de su familia se limaran. Aún no había hablado con sus padres, ni con sus hermanos, pero viendo como todos interactuaban, podía decir que esa noche las cosas iban a cambiar para bien.

Se pasó la noche, hablando y riendo con todos, sin quitar la vista ni un momento de su novia quien pululaba alrededor ayudando y viendo que faltaba en la mesa. Hazel estaba muy agradecido por Daisy y todo lo que había hecho por él. No tenía palabras que expresaran todo lo que sentía por ella y esperaba que antes de que se fuera de Seasons, pudiera decírselo lo mucho que ella significaba para Hazel.

A mitad de la fiesta, vio como Daisy se ponía de pie y tocaba la copa vacía que tenía en la mano con un tenedor suavemente para llamar la atención de todos. Cuando el público estuvo enfocado en ella, su novia dejó la copa vacía en la mesa y tomó otra que estaba llena de vino.

—Yo quiero hacer un brindis —escuchó que decía su chica y Hazel la miró un poco avergonzado mientras está miraba en su dirección viéndolo muy sonriente—. Quiero agradecerles a todos por atender a mi llamado y por venir a compartir con nosotros este maravilloso día —murmuró Daisy pasando la vista por todos los presentes—. Sé que la situación entre algunos de nosotros no ha estado muy bien o que hay varias diferencias de opiniones, pero espero que todo pueda resolverse y que podamos seguir disfrutando de nuestra amistad y familiaridad —deseó su chica con mucha alegría.

Hazel sonrió ampliamente ante las palabras de su novia. Era cierto que la situación en su familia no estaba bien o que había algunas diferencias, pero tenía fe de que algún día la situación familiar iba a resolverse y que todo volvería a ser como antes.

—Y bueno... —la mirada de Daisy fue hacia los padres de Hazel quienes estaban sonrientes. Hazel vio como las mejillas de su novia se teñían de rojo—. No quería que nos conociéramos de esta forma, pero ya que se dio... —Daisy se colocó derecha y soltó un suspiro—. Hola, soy Daisy la novia de Hazel, es un placer conocerlos finalmente —se presentó ante sus padres y todos los presentes saltaron en carcajadas.

—El placer es nuestro, Daisy —fue su madre quien habló mientras sonreía y luego se volvió hacia su esposo—. No importa la forma que nos conociéramos, pues estamos agradecidos de ti y de que has estado al lado de Hazel cuando no pudimos estar —dijo su madre mirando hacia Hazel esta vez y este sintió ganas de llorar por las palabras de su madre—. Muchas gracias y bienvenida a la familia, querida —dijo está alzando la copa hacia Daisy quien sonrió nerviosa.

Los demás alzaron la copa hacia ella y Hazel también lo hizo. A pesar de que su relación era reciente y que solo tenían menos de tres meses, Daisy se había convertido en alguien muy importante para él y había hecho cosas que nunca nadie había hecho. Lo de ellos era algo muy real y verdadero e iba a tratar con todas sus fuerzas de que, a pesar de la distancia, su relación continuará siendo fuerte.

—Gracias a todos —les agradeció Daisy aun avergonzada y esta luego miró hacia Hazel—. Por nuestro Hazel —brindó su novia alzando la copa hacia delante.

—Por nuestro Hazel —murmuraron todos los presentes para luego brindar y chocar ligeramente las copas con quienes le quedaban cerca.

Hazel le pasó un brazo a su novia por los hombros y le dio un beso en la mejilla para después brindar con esta y luego tomar la champaña en su copa. Estaba muy agradecido de todo lo que había hecho las chicas y esta para su cumpleaños.