Lotos Rojos

Parte 20.- Verte partir

Wen Zhuliu hizo un gran trabajo al organizar el dinero que ganaban. Poco a poco los túmulos funerarios se convertían en un lugar más apto para residir. Seguían ofreciendo sus servicios médicos y espirituales. Parecía que una buena racha se aproximaba.

" Wei Wuxian es acusado de agredir a un miembro de Lanling Jin con cultivo demoniaco. Se exige su presencia a un juicio con todos los clanes presentes para evaluar la situación. Su inasistencia lo condena a la pena máxima de nuestro clan: la muerte".

-Pfff, es una invitación peculiar para tomar el té con el líder Jin.- Wei Wuxian no se veía afectado.- Iré y regresaré.

-¿Qué se supone que hiciste? - pregunta Jiang Cheng

-Ofender a alguien.

-Eso es normal en ti - agrega Wen Qing que teje una canasta con calma.

-No puedes asistir solo- dice Wen Zhuliu algo tenso- Y yo no puedo asistir sin que parezca una ofensa. 

-Van a querer provocarte, yo iré contigo- dice Madame Yu.

-Entonces yo también voy- dice Jiang Cheng, no lo dice en voz alta, pero Madame Yu carece de poder, Zidian ahora responde al menor de los Jiang

Wen Zhuliu permanece callado el resto de la semana, pero de alguna manera parece que rentó un palanquín que atarán al ultimo caballo que parece resistir un viaje. Para cuando parten, dentro van Jiang Yanli y Madame Yu. Jiang Cheng y Wei Wuxian guiarán el caballo. Puede ver a Wen Qing dándole un paquete de provisiones a Jiang Cheng y regañándolo al mismo tiempo, es la extraña manera que tiene de decirle que se preocupa por el.

-Volveremos mañana por la tarde- promete madame Yu mientras sostiene la mano de Wen Zhuliu y le da una sonrisa sincera - no olvides cuidar los nabos. 

Le da un breve beso en la mano antes de dejarlos partir.

-Ya ansío tu regreso.

Es la primera vez que se separan desde que se reencontraron. El corazón de Wen Zhuliu duele con preocupación.

-Wen Ning, no dejes que te vean.- El joven asiente.

No quiere ser paranoico, mañana por la tarde estarán de regreso.

Pero no es así, ya casi es de noche al otro día. No hay signos de ellos, y menos de Wen Ning. Este último no puede morir, y menos permitir que les pase algo a ellos. A menos que Wen Ning haya sido emboscado, y esto solo le deja claro algo. El clan Jin no permitió su regreso.

Está a mitad del camino bajando la montaña cuando los ve. Wen Ning cargando en su espalda a Wei Wuxian inerte. El general fantasma parece más pálido, lo cual es imposible, el ya está muerto. Pero si la sangre ya no corre por Wen Ning, ¿Por qué está cubierto de ella?

Siente la bilis subir por su garganta cuando lo ve inclinarse, las lagrimas no salen del cadáver pero su voz suena como si llorara.

-¿Qué pasó?

-Yo...maté al líder Jiang, no recuerdo nada. Cuando recuperé el control, el señor Wei ya estaba inconsciente. No pude dejarlo ahí, pero no pude hacer nada por los demás.

-¡¿Cómo que no pudiste que hacer nada?, tu trabajo era evitar que esto pasara!- Wen Zhuliu levantó con fuerza por el cuello a Wen Ning, el cuerpo de Wei Wuxian cayó con un golpe seco, ajeno a la discusión- ¿Qué carajos quieres decir con que perdiste el control?

Es ahí donde se da cuenta. Wen Ning es solo una marioneta que controla Wei Wuxian al pelear, lo que significa que quien subestimó su fuerza es nada menos que el joven en el piso.