𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟖

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𝐶𝑎𝑝𝑖́𝑡𝑢𝑙𝑜 18


LAYLA


𝐻𝑎𝑐𝑒 𝑢𝑛 𝑎𝑛̃𝑜...

Estaba un poco nerviosa, no sabía cómo reaccionarían mis amigos al verme llegar con Osiel a la fiesta de cumpleaños de Vianney. Había pasado toda la semana rogándole que me acompañara. Habíamos quedado que lo nuestro quedaría en secreto por el momento y después veríamos cómo decirles a nuestros padres.

Me puse un vestido color azul, con un gran escote en la espalda, tratando de lucir lo mejor posible para la ocasión. Mientras me miraba en el espejo, una mezcla de emoción y ansiedad me invadía, pero sabía que valdría la pena ver la reacción de todos cuando llegáramos.

Cuando Osiel llegó a mi puerta, se veía tan guapo como siempre, no pude resistirme y lo besé. Cuando nos separamos, me tomó de la mano con ternura.

—Eres tan hermosa —me dio un beso en la mejilla.

Tomé mi bolso, y salimos juntos en camino a la fiesta. Cuando llegamos, todos los ojos se posaron en nosotros. Había murmullos y sorpresa en los rostros de mis amigos. Osiel se fue a buscar nuestras bebidas, y en ese momento, Vianney se acercó a mí con una sonrisa.

—Layla, ¿qué hace Osiel aquí? —preguntó sin quitarle la mirada de encima.

No podía decir nada aún, aunque moría de ganas de hacerlo.

—Le pedí que me acompañara. Así no estaría molestando —mentí.

Vianney asintió y me arrastró hacía donde estaban los demás. No quería alejarme de Osiel, pero sabía que si me veían con él demasiado tiempo, sospecharían acerca de lo nuestro.

La fiesta era increíble, pero no podía dejar de ver a Osiel, quien estaba en una de las mesas solo con su teléfono en las manos. Se le veía aburrido, y me sentía mal porque yo sí me estaba divirtiendo y él no.

De repente, Chase se acercó a mí y me sacó de mis pensamientos.

—Te ves muy bien esta noche, Layla —dijo, lo que me hizo desviar la mirada de Osiel hacia él.

—Gracias, Chase. Tú también te ves muy bien. Lo siento, ¿me disculpas? —dije, caminando hacia la mesa donde estaba Osiel.

Cuando me senté a su lado, él desvío la mirada de su teléfono y me sonrió.

—¿Qué sucede? No te estás divirtiendo.

—No es eso, solo quise venir a hacerte compañia —respondí, devolviéndole la sonrisa.

Osiel tomó mí mano por de bajo de la mesa, lo que me hizo sentir la necesidad de besarlo, pero me contuve cuando apareció Vianney y Natalia justo enfrente de nosotros.

—Les tomaré una foto del recuerdo, chicos —dijo Natalia.

Asentí y esperé a que Vianney se pusiera junto a nosotros. Natalia tomó la foto y luego nos señalo a Osiel y a mí.

—Ahora ustedes dos.

Me acerque un poco más a Osiel y, en un impulso, lo besé en la mejilla justo cuando sonó el clic de la cámara.

Me separé de él con las mejillas sonrojadas. Vianney y Natalia me veían sorprendidas por lo que acababa de hacer.

Por otro lado, Osiel tenía su mano en mi muslo, lo que me dio a entender que no le había molestado en lo absoluto. Nuestras miradas se encontraron, pero tanto Natalia con Vianney me arrastraron para irme con ellas. Osiel solo dijo que me fuera a divertir.

𝐋𝐚 𝐏𝐫𝐨𝐦𝐞𝐬𝐚 𝐃𝐞 𝐔𝐧 𝐁𝐞𝐬𝐨Where stories live. Discover now