♚•𝘾𝙖𝙥𝙞𝙩𝙪𝙡𝙤 𝙓𝙓𝙑𝙄𝙄𝙄•♚

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El capítulo tan esperado narrado por Hades, no lo juzguen sin antes conocerlo de todas formas compararlo sería estúpido porque el no es humano

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El capítulo tan esperado narrado por Hades, no lo juzguen sin antes conocerlo de todas formas compararlo sería estúpido porque el no es humano.

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☤Quisiera encontrarme
y volver a ser yo pero
parece que de mi no queda nada.☤
_𝘈𝘧𝘵𝘦𝘳 𝘏𝘰𝘶𝘴𝘦ツ.


Hades

¿Cómo contar una historia sin que antes de llegar al final te vean como el malo?.

MESES ANTES:

Si no podía ser el rey en El Infierno, sería el REY de este mundo.

En el mundo de los mortales funcionaban las cosas muy distinto a El Infierno. Aquí existen leyes que deben cumplir los humanos para no terminar tras unas rejas o muerto, pero no hay nada que unos cuantos papeles no pudieran resolver; todo lo opuesto a El Infierno, cuando incumples una regla, una ley o llevas la contraria a alguien que no deberías por más mínima que sea lo pagas con algo mucho peor que la muerte.

El exilio.

Que son los papeles?. Son algo que todos los humanos se ezfuerzan en alcanzar, con esos papeles llamados DINERO puedes conseguir todo lo que necesitabas; poder, respeto, contactos importantes, sexo, propiedades lujosas e incluso aliarte con personas importantes que se encargan de dirigir cada parte de este mundo y mucho más de todo lo que no puedes llegar a imaginarte.

Llevaba tiempo de analizar a los humanos y podía llegar a decir que no todos eran iguales, pero solo con causarles un daño puedes hacerlos cambiar, son manipulables.

Al final del día estar aquí conviviendo entre ellos no era tan malo, viviendo como ellos, y siendo como uno de ellos no era tan malo como estar en El Infierno.

Con el tiempo entendí que era mucho más fácil manipular a mil humanos que a un demonio.

Después de todo en algo tenía un parecido con ellos: La ambición.

¿Se puede ser feliz con tan poco?.

Por supuesto que no, yo no estaba aquí por el dinero, estaba aquí por el poder.

No estaba en mis planes querer ser un rey quería ser El Rey, algo que nunca podría ser en El Infierno y mucho menos estaba dispuesto a ser esclavo de alguien a quien debería llamar padre.

No nací para servir a nadie, yo nací para ser Rey.

Por suerte tenía la libertad de poder ir a donde yo quisiera aunque eso significaba que aveces tenía que soportar que mi padre quisiera controlarme, pero era mucho mejor eso que estar bajo su oscura y temible sombra.

Los Dioses No Van Al CieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora