Mi familia

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– Levi – suelta un ligero gruñido.

Tres días atrás recibe la visita del Omega rubio en su casa y ahora se encuentra con el alfa rubio en el parque.

– Oh, son tus cachorros – mira el carrito de bebé con tres compartimentos – son muy pequeños – sonríe – ¿Cómo es que Eren permitió que salieras solo con tres cachorros bebés? Si yo fuera tu alfa no lo permitiría o te acompañaría a todos lados – sonrisa ladina.

– Tch, para tu mala suerte nunca sería tu Omega y mi alfa se encuentra por allá – señala al puesto de los helados.

– ¿Acaso el parto te volvió más huraño? – Levi gruñe – quiero hablar tranquilamente, no voy a molestar – el Omega suaviza el gesto – quiero pedir disculpas por lastimarte aquel día que diste a luz. No pensé que mis fermonas te harían romper fuente antes de tiempo.

– Nos ayudaste a llegar al hospital y de cierta forma también lograste que dejara de lado mi depresión postparto y ahora ya pueda tomar en brazos a mis cachorros – encoge los hombros – acepto tu disculpa – Erwin sonríe y lo abraza sorprendiendolo.

– Eres un gran Omega Levi, Eren tuvo mucha suerte al convertirse en tu alfa.

– Lo sé, ahora suéltalo – inmediatamente el azabache se aleja del rubio – Li, vayamos a casa – lo atrae a él.

– Eren calma – murmura – todo esté bien cariño – ronronea.

El rubio mira divertido la escena, el castaño tomando de la cintura a Levi con la mano izquierda mientras que en la otra lleva dos helados, de chocolate y pistache. Levi luce tierno al lado de Eren, estatura baja y cuerpo delgado, aún se pregunta cómo en su vientre pudieron caber esos tres pequeños que duermen plácidamente en la carriola.

– ¿Por qué irse tan rápido? ¿Temes que vuelvas a tu esposo mi amante así como lo hiciste con el mío? – Eren suelta un gruñido.

– Vamos a casa Levi – besa su frente y luego le entrega su helado – mantente alejado de mi Omega – lo señala.

Erwin ríe burlón mientras observa a la pareja irse del parque. Si no pudo reventarle la cara por acostarse con Armin podrá molestarlo dándole celos con Levi. El castaño sabe que él aún tiene sentimientos por el azabache, aunque ya no tan fuertes como antes. 

– E-eren – sus bellos se erizan al sentir los besos en su cuello.

– Shh... Despertarás a los cachorros – sus manos vagan por su pequeña cintura.

– Esos cachorros se parecen a su padre, difícilmente los despierta uno – Eren ríe ligero – ¡Mgh!

– Omega travieso, deseas tanto que entre en ti. Estás mojado – mueve dos dedos en su interior – Precioso – muerde su oreja suavemente.

Levi sonríe dando media vuelta quedando frente a frente. Enreda sus manos en el cuello de su esposo y comienza a besarlo. Retira la playera de su esposo con su ayuda y después la suya sintiendo las manos morenas recorrer por su espalda y su cintura deteniéndose sobre la costura de dos meses.

– Estoy horrible – mira su vientre – Eren – el castaño no responde, solo mira su vientre.

Se inca frente a su Omega y besa suavemente la cesárea dedicándole una gran sonrisa.

– Es preciosa Li – mira a su Omega – es una prueba de las vidas que guardó en su interior por casi 9 meses – Levi sonríe – una prueba de los hermosos cachorritos que procreamos – se incorpora – eres precioso mi amado Levi – besa su cuello.

Se dejan caer sobre la cama, con Levi sobre él besándolo. Sus grandes manos acarician su trasero debajo de la ropa interior sacándole ligeros gemidos en medio del beso.

Just you and me - EreriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora